Crecimiento económico en perspectiva
Juan Guiliani Cury
Los números del crecimiento de la economía dominicana siguen siendo favorables. De acuerdo al Banco Mundial, la economía cerraría en el 2022 en un 5.3% unos tres puntos arriba de los previos estimados oficiales y de los organismos multilaterales. Para los años 2023 y 2024 según las proyecciones, el Producto Interno Bruto (PIB) se situaría en 4.8% y 5.0%, respectivamente, lo que es también una buena noticia para la Nación.
Las cifras del Banco Mundial revelan en un estudio de 19 países de la región, que la economía dominicana en el año que recién finalizó solo es superada por Guyana que cerraría con un elevado crecimiento de 57.8%, seguido de Colombia 8.0% y Panamá con un 7.2% de crecimiento. El organismo mundial con sede en Washington.
D.C., sin embargo, no pronóstica para este año un crecimiento global optimista. En cambio, dice que la economía global presenta un cuadro de una potencial recesión a solo tres años de haberse atravesado una de las peores crisis sanitaria como la pandemia del Covid-19 dejando más de 6 millones de muertos en todo el mundo. Según el organismo multilateral, éste observa que la República Dominicana puede combinar un sólido crecimiento económico estimado en un 4-9% para este año y el próximo.
Solo dos países estima decrecerán en sus economías, uno de ellos es Haití con -1.5% que atraviesa una severa crisis política, social y de seguridad; y el Paraguay con un -0.3%. Varios factores entre lo que pudieran influir de manera negativa este año pudieran ser: una permanencia de una elevada inflación que conduciría una recesión global, aunque, en este aspecto – cabe destacar que en la mayor economía del mundo la de Estados Unidos -, la inflación ya ha comenzado a ceder significativamente.
Otros factores en juego serían, las posibles alzas en la tasa de interés, la amenaza del resurgimiento del Covid-19 y la intensificación de los conflictos geopolíticos como la guerra entre Rusia y Ucrania y otras perturbaciones regionales y extrarregionales. El mensaje que manda el Banco Mundial para las economías latinoamericanas y caribeñas es que, para aquellos que tienen un flujo de grandes inversiones, mejorar la calidad de los recursos humanos; para los que atraviesan un déficit fiscal agudo, se le recomienda optimizar la eficiencia del gasto; y para aquellos con una inversión privada extenuada, la sugerencia es hacer reformas que mejoren el clima de negocios en el sector privado.