Gobierno de República Dominicana reactiva canal La Vigía para asegurar abastecimiento de agua
Santo Domingo, 21 de septiembre – El Gobierno de la República Dominicana inició el miércoles los trabajos para la reactivación de la toma de agua en el canal La Vigía sobre el río Dajabón o Masacre. Esta medida se anunció como una solución a corto plazo para garantizar el acceso al agua a los productores agrícolas y habitantes de la provincia de Dajabón.
La noticia fue confirmada por el portavoz de la Presidencia, Homero Figueroa, a través de su cuenta en la red social X (anteriormente conocida como Twitter). Figueroa expresó: «Ya se dio inicio a los trabajos de reactivación de la toma de agua en La Vigía, en el río Dajabón. Esto permitirá garantizar agua a cientos de productores agropecuarios».
El presidente Luis Abinader había anunciado la reactivación del canal de La Vigía el 11 de agosto pasado, como respuesta a las consecuencias de la construcción de un canal sobre el río Masacre por parte de civiles haitianos. El Gobierno dominicano considera que esta obra viola el Tratado de Paz de 1929, que prohíbe la desviación de los ríos transfronterizos.
Abinader explicó que el canal La Vigía tiene una longitud de al menos 10 kilómetros y puede distribuir un metro cúbico de agua por segundo. Esta cantidad de agua es suficiente para abastecer la región ubicada al sur del territorio haitiano, y luego el agua fluye de regreso al río Masacre, más al norte de la ciudad de Dajabón.
Cabe mencionar que la toma de La Vigía no había estado operativa desde 2007 debido a conflictos con ciudadanos haitianos. La reactivación de este canal se considera una medida a corto plazo mientras se avanza en la construcción de la presa de Don Miguel, que representa la solución definitiva. El presidente Abinader anunció que en dos meses comenzará la licitación de esta obra, con un presupuesto de alrededor de 2,700 millones de pesos y un plazo de construcción de aproximadamente 30 meses.
La construcción del canal sobre el río Masacre había sido paralizada en 2021 después del asesinato de Jovenel Moïse, pero un grupo de campesinos haitianos retomó la obra en septiembre de este año, respaldados por grupos empresariales, políticos e incluso bandas armadas. El presidente Abinader había solicitado en reiteradas ocasiones la detención de esta obra y el diálogo con Haití, pero al no obtener respuesta positiva, tomó medidas técnicas para garantizar el abastecimiento de agua, como la reactivación de La Vigía y la construcción de la presa de Don Miguel.
Además de estas medidas hídricas, el Gobierno de República Dominicana cerró completamente la frontera con Haití, suspendió la emisión de visados para ciudadanos haitianos y prohibió la entrada al país a los «financiadores» del canal. El cierre de la frontera lleva una semana en vigor y se mantendrá hasta que los haitianos detengan la construcción de la obra, momento en el cual el Gobierno dominicano está dispuesto a sentarse en una mesa de diálogo.
En su discurso ante la ONU, el presidente Abinader enfatizó que su gobierno no busca confrontación con el pueblo haitiano, sino que está enfrentando a actores incontrolables que representan una amenaza para la estabilidad en Haití y la seguridad de los recursos hídricos.
