Las elecciones en Bielorrusia refuerzan a su líder autoritario pese a llamadas al boicot
TALLÍN, Estonia, 26 febrero — Las autoridades bielorrusas anunciaron el lunes los resultados preliminares de las elecciones parlamentarias y locales, en las que sólo se permitió presentarse a candidatos leales al líder autoritario del país. La oposición pidió a los votantes que boicotearan la consulta.
La votación consolidó aún más el mandato del presidente, Alexander Lukahsenko, que gobierna desde hace casi 30 años y anunció su intención de presentarse a otro mandato de cinco años en las elecciones presidenciales del año que viene.
La mayoría de los candidatos pertenecían a los cuatro partidos registrados oficialmente: Belaya Rus, el Partido Comunista, el Partido Democrático Progresista y el Partido de Trabajo y Justicia. Todos ellos apoyan las políticas de Lukashenko.
La Comisión Electoral dijo que el 73% de los 6,9 millones de posibles votantes había participado para llenar los 110 escaños del parlamento nacional, de los que 51 fueron a Belaya Rus, y 12.514 puestos en consejos locales.
Se trataba de los primeros comicios en Bielorrusia desde la disputada votación de 2020 que otorgó a Lukashenko su sexto mandato y desencadenó unas protestas masivas sin precedentes.
Las manifestaciones tomaron el país durante meses y sacaron a cientos de miles de personas a la calle. Más de 35.000 personas fueron detenidas. Miles fueron golpeadas bajo custodia policial y cientos de medios independientes y organizaciones no gubernamentales fueron cerrados e ilegalizados.
Lukashenko ha dependido de subsidios y apoyo político de su principal aliado, Rusia, para sobrevivir a las protestas. En febrero de 2022 permitió a Moscú que utilizara el territorio bielorruso para enviar tropas a Ucrania.
El presidente de Rusia, Vladímir Putin, felicitó el lunes a Lukashenko por “la victoria confiada de las fuerzas patrióticas de Bielorrusia” que ayudó a “garantizar la estabilidad política interna”.
La líder opositora bielorrusa Sviatlana Tsikhanouskaya, que está en el exilio en la vecina Lituania después de desafiar a Lukashenko en las elecciones presidenciales de 2020, instó a los votantes a boicotear la consulta, que tachó de “farsa sin sentido”.
En un detalle sorprendente en un país estrictamente controlado de 9,5 millones de habitantes, el mensaje de video de Tsikhanouskaya se emitió el sábado en toda Bielorrusia después de que activistas opositores lograron acceder a unas 2.000 pantallas utilizadas para publicidad en las calles. El Centro de Derechos Humanos Viasna reportó el domingo que varios empleados de la compañía propietaria de las pantallas fueron detenidos con rapidez.
Las elecciones se produjeron bajo una represión constante de la disidencia. Más de 1.400 presos políticos siguen entre rejas, incluidos líderes de partidos opositores y el reconocido activista de derechos humanos Ales Bialiatski, que ganó el Nobel de la Baz en 2022.
Tras la votación, Bielorrusia formará un nuevo organismo, la Asamblea Popular de Toda Bielorrusia, con 1.200 escaños y que incluirá a funcionarios de alto nivel, legisladores locales, sindicalistas, activistas progobierno y otras personas. Tendrá amplios poderes, como la capacidad de considerar enmiendas constitucionales, así como nombrar funcionarios electorales y jueces.
Hace unos pocos años se creía que Lukashenko estudiaba liderar el nuevo organismo tras dejar el cargo, pero sus planes parecen haber cambiado y el domingo anunció que se presentaría a las elecciones presidenciales del año que viene.
AP