Hombre mata a 6 personas a puñaladas en centro comercial de Sydney antes de ser abatido por policía
SYDNEY, 13 abril — Un hombre mató a puñaladas a seis personas el sábado en un concurrido centro comercial en Sydney antes de ser abatido, dijo la policía. Cientos huyeron de la caótica escena, muchos llorando con niños en brazos, mientras ocho personas, incluyendo un bebé de nueve meses, resultaron heridas.
El sospechoso, de 40 años, apuñaló a sus víctimas en el Centro Comercial Westfield de Bondi Junction, en los suburbios del este de la ciudad, antes de que una inspectora de la policía le disparó cuando se dio la vuelta y levantó un cuchillo, explicó a reporteros el subcomisario de la policía de Nueva Gales del Sur, Anthony Cooke.
“Nada más decían: corre, corre, corre; alguien ha sido apuñalado”, dijo un testigo a ABC TV en Australia. “(El atacante) caminaba muy tranquilo como si estuviera tomando un helado en un parque. Y luego subió las escaleras mecánicas… y probablemente en aproximadamente un minuto escuchamos tres disparos”.
Seis de las víctimas —cinco mujeres y un hombre— y el agresor fallecieron. Los ocho heridos fueron atendidos en hospitales y el bebé estaba siendo operado, indicó la comisaria, Karen Webb, que añadió que era demasiado pronto para conocer su estado.
“Estamos seguros de que no hay ninguna amenaza en curso y de que estamos tratando con una persona que ya ha fallecido”, dijo Webb en una conferencia de prensa. “Este no es un incidente terrorista”.
La policía no revelará todavía la identidad del agresor, indicó la comisaría, apuntando que siguen trabajando para determinar sus motivos.
Cooke apuntó que se había abierto una investigación “larga y precisa”.
La inspectora de policía, una oficial de alto rango, estaba sola cuando se enfrentó al sospechoso poco después de llegar al lugar, “salvando la vida de varias personas”, afirmó Cooke.
La oficial “mostró un enorme coraje y valentía”, dijo Webb.
“Si ella no hubiera disparado, él habría seguido adelante y no sé cuánto más habría hecho”,
Un video mostró varias ambulancias y coches de policía alrededor del centro comercial y a gente saliendo en masa de su interior.
Los paramédicos estaban tratando a pacientes en el lugar.
Un testigo, Roi Huberman, que trabaja como ingeniero de sonido para ABC, contó a la televisora que se refugió en una tienda durante el incidente.
“Y de pronto escuchamos un disparo, o quizás dos, y no sabíamos qué hacer”, afirmó. “Entonces, una persona muy capaz de la tienda nos llevó a la parte de atrás, que se puede cerrar con llave. Luego cerró la tienda y nos dejó salir por detrás y ahora estamos fuera”.
La familia real británica, que también es realeza en Australia, expresó su conmoción y tristeza por los apuñalamientos.
El rey Carlos III dijo que él y su esposa, la reina Camilla, estaban “completamente conmocionados y horrorizados” por el “ataque sin sentido” en Sydney y que sus “corazones están con las familias y los seres queridos de aquellos que han sido asesinados tan brutalmente”. El hijo mayor del rey, el príncipe Guillermo, y su esposa Catherine, princesa de Gales, dijeron que ellos también estaban “conmocionados y entristecidos” y que sus pensamientos están con los afectados y con los “heroicos socorristas de emergencia que arriesgaron sus propias vidas para salvar a otros”.
AP