Dominicana asesinada por su esposo en Nueva Jersey frente a sus hijas

Nueva York, 25 de septiembre – La comunidad dominicana en Nueva Jersey está de luto tras el trágico asesinato de Rosanna Rodríguez, una mujer de origen dominicano que fue apuñalada varias veces por su esposo, Wellington Leonardo, también dominicano, durante una disputa doméstica en su hogar en el condado de Middlesex, en Perth Amboy, el pasado sábado.

El violento suceso ocurrió frente a las cuatro hijas de la pareja, de 13, 11, 3 años y una bebé de 11 meses. El ataque tuvo lugar solo tres días antes de que Rodríguez cumpliera 40 años. A pesar de que fue llevada de emergencia al HMH Raritan Bay Hospital, no pudo sobrevivir a las heridas y falleció horas después del ataque.

Leonardo fue arrestado y ahora enfrenta múltiples cargos de asesinato en primer grado, además de posesión ilegal de un arma y poner en riesgo a menores, por haber cometido el crimen en presencia de sus hijas.

Vecinos de la familia expresaron su shock y tristeza tras enterarse del asesinato. Magdalena Jerez, una vecina cercana, compartió su angustia con la cadena Univision, revelando que desde el día de la tragedia no ha podido dormir. «No puedo casi dormir», confesó, explicando que aquella madrugada escuchó los sollozos de Rodríguez, pero nunca imaginó la gravedad de la situación.

Jerez relató que inicialmente pensó que alguna de las niñas de la pareja podría haberse enfermado. «Escuché que lloraba y pensé que quizás alguna de las niñas se había puesto mala», dijo, pero más tarde se dio cuenta de que algo peor ocurría cuando escuchó a la policía irrumpir en la casa. «Algo pasa», le dijo a su esposo, aún conmocionada por lo ocurrido.

Gerardo Rodríguez, el padre de la víctima, recordó a su hija como una mujer tranquila y siempre feliz, lamentando profundamente la pérdida y la relación que ella mantenía con Leonardo. «Lo aguantó a él, de tanto que lo quería», dijo Rodríguez. Según el padre, la familia le aconsejó en varias ocasiones que lo dejara, pero Rosanna siempre priorizó mantener la unidad familiar.

«Nosotros le decíamos que él no servía, que era un teatrero, un sinvergüenza», expresó Gerardo Rodríguez con dolor, «pero ella siempre amándolo, por no separarlo de sus hijos, hasta que llegó a esto». El padre de Rosanna explicó que, aunque su hija nunca expresó abiertamente los problemas que tenía con su pareja, la familia conocía la difícil situación que atravesaba.

«Nunca estaba brava, nunca peleaba, siempre estaba sonriendo», recordó Gerardo sobre su hija, quien, según él, siempre intentó mantener una fachada de felicidad, sin revelar el conflicto que vivía dentro de su hogar.

Los restos de Rosanna Rodríguez serán velados en la funeraria Gustav J. Novak este jueves, y el viernes por la mañana serán trasladados al Alpine Cemetery, donde recibirá su descanso final.

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