Hugo Beras: “Mi tiempo en prisión fue como un campamento de vida”
Santo Domingo, 18 de noviembre de 2024 – Mientras el apresamiento de Hugo Beras, exdirector del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), generaba preocupación en parte de la sociedad y el ámbito mediático, el propio implicado sorprendió con declaraciones relajadas y hasta humorísticas sobre su paso por la cárcel de Najayo. Con una sonrisa en el rostro, Beras comentó que su tiempo en prisión le permitió “rebajar unas libritas” que, según él, le hacían falta.
Beras, arrestado junto a Jochi Gómez Canaán y Pedro Padovani durante la Operación Camaleón, enfrenta acusaciones de corrupción relacionadas con un presunto desfalco de 1,317 millones de pesos destinados a la instalación de una red semafórica en el Gran Santo Domingo. En un principio, los tres imputados fueron enviados a prisión preventiva por 18 meses; sin embargo, un mes después obtuvieron libertad condicional bajo estrictas medidas de coerción.
En su primera aparición pública tras ser liberado, Beras participó en el programa de radio “Vehículos en la Radio”, donde describió su experiencia en Najayo con un tono inusualmente ligero. “Rebajé muchísimo, si yo lo hubiese sabido antes, habría pedido una temporada para bajar unas libras que nunca había podido bajar. La comida era buena, y para mí fue como un campamento de vida”, comentó.
El exfuncionario también reflexionó sobre su proceso legal, destacando que las adversidades deben ser vistas como etapas transitorias. “El mundo no se acaba por un tropiezo. A veces creemos que todo ha terminado, pero no es así. Son procesos que la vida te da”, expresó. Incluso mencionó que su historia le ha valido sugerencias de llevarla a plataformas como Netflix.
Los tres implicados en la Operación Camaleón están acusados de integrar una presunta red de corrupción y crimen organizado involucrada en delitos como desfalco, estafa al Estado, falsificación, contrabando, y sabotaje a infraestructuras críticas. El caso se intensificó el pasado 9 de noviembre, cuando Hugo Beras solicitó al presidente Luis Abinader una licencia sin disfrute de sueldo tras revelarse nuevas informaciones sobre las irregularidades en la ejecución del sistema semafórico del Gran Santo Domingo.
Para recuperar su libertad, Beras tuvo que pagar una garantía económica de cinco millones de pesos, además de cumplir con el impedimento de salida del país y presentarse los días 30 de cada mes ante las autoridades judiciales. Gómez Canaán y Padovani también obtuvieron libertad condicional bajo medidas similares.
La decisión del tribunal, anunciada cerca de las 11 de la noche, fue justificada por el juez al considerar que los imputados presentaron suficientes vínculos con el país, lo que reducía el riesgo de fuga. El caso sigue generando atención mediática y debate público debido al alcance de las acusaciones y el impacto que podría tener en la percepción de la lucha contra la corrupción en el país.