Perspectivas turísticas positivas (y 2)
Por Juan Llado
Complementando la entrega anterior aquí se repasan, a vuelo de pájaro, temas tales como la promoción internacional de la imagen del país, los nichos de mercado a conquistar y los desafíos que confronta tanto el sector privado como el público para consolidar y mantener la competitividad del destino. Mucha información citada ha sido suplida por la inteligencia artificial (ChatGPT-4).
La promoción turística, por su lado, ha resultado efectiva en tiempos recientes en parte por la “demanda comprimida” por los viajes que se derivó de las restricciones de viajes de la pandemia. ChatGPT-4 reporta que el sector privado ha jugado su papel: “Las grandes cadenas como Marriott, Hilton, Iberostar y Meliá destinan entre el 5% y el 10% de sus ingresos anuales totales a estrategias de marketing y promoción. En el caso de RD, estas cadenas asumen gran parte de su promoción, especialmente en mercados clave como Estados Unidos, Canadá y Europa. Sus estrategias se enfocan en publicidad internacional, asociaciones con plataformas de reservas y agencias de viaje, y campañas de promoción específicas en ferias internacionales de turismo.”
El complemento estatal de la promoción internacional, por su parte, sigue enfocado en los roadshows y la asistencia de altos funcionarios a las ferias internacionales. “Los roadshows personalizan los mensajes publicitarios y permiten relaciones directas con los operadores turísticos claves, mientras las ferias proyectan una visibilidad global, aúpan el “networking” y son un espacio para lanzar nuevos productos, campañas y eventos, asegurando cobertura en medios globales.” El país todavía tiene 23 oficinas de promoción en el exterior, pero debe admitirse que, en gran medida, su función ha sido suplantada por el internet y, en consecuencia, muchas deberían cerrarse.
Donde actualmente se registra un relativo atraso de la promoción turística estatal es en respecto al marketing digital. Este “no ha parado de crecer desde que existe, arrasando en la mayoría de los sectores e industrias por las que pasa. Pero sin duda el marketing y el turismo han sabido cohesionarse hasta tal punto que hoy en día no podemos entender la promoción del sector turístico si no es con estrategias de marketing digital.” El uso de las redes sociales, el email, el posicionamiento en los buscadores, los chatbots, los influencers, los bloggers, los padcasts, la creación de contenidos, YoutubeTV, XTV y la realidad virtual son solo algunos componentes del marketing digital que deberán incorporarse en una estrategia de promoción más efectiva. La ejecución de esa estrategia podría ser confiada a agencias locales.
Por sí misma, la inteligencia artificial presenta un mayúsculo reto para la evolución de la promoción turística y, en términos generales, para el desarrollo del turismo. Los ministros de turismo del G7 acaban de advertir que la misma “puede redefinir los límites del turismo, allanando el camino a nuevas sugerencias y experiencias personalizadas para los turistas, mejorando las operaciones comerciales y la organización del trabajo y creando nuevas oportunidades de empleo.» La personalización de la promoción parece ser el renglón de mayor impacto inmediato.
En materia de nichos potenciales de turismo que el país debe explotar se menciona el turismo de lujo, de aventura, religioso, deportivo e inclusivo. (El ecoturismo tendría una cabida limitada por lo limitado de la oferta en relación con los competidores de la región del Caribe y Centroamérica.) Pero de todos estos segmentos del mercado el más valioso, en términos de su impacto y su proyección futura, es el del lujo. “El turismo de lujo es aquel que se centra en ofrecer a los viajeros la máxima calidad en comodidades, servicios y vivencias.”
El país ya cuenta con un número importante de resorts de lujo. El de mayor ultra lujo es el hotel boutique Amanera ubicado en Rio San Juan, el cual consta de 25 casitas de lujo y un campo de golf. El Hotel Eden Rock Cap Cana, por su lado, dispone de 60 suites y villas privadas y es miembro de Relais & Chateaux, una cadena mundial de mercadeo de 580 hoteles de lujo y restaurantes gourmet. Otros de similar catadura en la categoría de alto lujo incluye al Hotel Cayo Levantado (218 suites y villas), Sanctuary Cap Cana (96 suites), el icónico Casa de Campo (247 habitaciones, múltiples villas y famosos campos de golf), Zoetry Agua Punta Cana (96 suites y enfocado en la gastronomía orgánica y tratamientos de spa y relajación), el boutique Hotel Tortuga Bay en Punta Cana (con atención personalizada y playa privada) y el Ocean Club Resort de Puerto Plata (64 suites y villas y vistas panorámicas al mar).
Esos resorts se destacan no solo por su exclusividad y lujo, sino también por su compromiso con la sostenibilidad y experiencias personalizadas que atraen a un público de alto perfil. ChatGPT-4: No existen datos sobre el volumen de turistas de gran lujo que visitan el país, pero se estima que son aquellos que pagan tarifas entre 500 y 800 dólares por noche, dependiendo de la temporada. Para el Amarena las tarifas comienzan en US$2,300 por sus casitas con vistas al océano. Otros hoteles que también se consideran de lujo y que disponen de muchas habitaciones y/o villas incluyen a los Hyatt en Cap Cana (Zilara y Ziva), el Secrets Punta Cana, el Paradissus Grand Cana, el Xeliter Balcones de Las Terrenas, el Sea Horse Ranch, el Península de Samana y el J.W.Marriott de Santo Domingo.
Por supuesto, el país está interesado en atraer nuevos proyectos de alto lujo porque generan mayores ingresos y los colaboradores tienen salarios más altos. Pero además del segmento de lujo, las autoridades han expresado su intención de perseguir otros segmentos: cultural, deportivo, religioso, aventura, avistamiento de aves, agroturismo (“Valle de los mil cultivos” en Bonao) y ecoturismo. Estos segmentos no reditúan gran cosa en términos de volumen de visitantes, pero algunos generan altos ingresos y otros diversifican la oferta y hacen a nuestro destino más competitivo.
Por su posicionamiento en el mercado de sol y playa y sus bajos precios, el sector turístico dominicano se puede considerar bastante competitivo. Sin embargo, el Foro Económico Mundial todavía clasifica a otros destinos de América Latina por encima de la RD (ver gráfica).
En consecuencia, nuestro país debe superar escollos y acometer desarrollos para clasificar en un mejor sitial. ChatGPT: “Para consolidar su competitividad y posicionamiento global, República Dominicana necesita un enfoque integral que combine innovación, sostenibilidad, promoción estratégica y desarrollo inclusivo, asegurando la diversificación de su oferta turística. La colaboración público-privada será esencial para superar estos desafíos y mantener su liderazgo en el Caribe.”
Según ChatGPT-4 los siguientes son los desafíos de desarrollo más importantes, separados para los sectores público y privado. En cuanto al sector público se mencionan 1) infraestructura y acceso, incluyendo carreteras y conectividad aérea, 2) sostenibilidad ambiental (incluyendo la protección del acuífero del este), 3) diversificación del producto turístico, y 4) gestión de riesgos y crisis. En materia del sector privado se citan 1) la innovación y digitalización, 2) la capacitación del capital humano, 3) competencia regional y 4) alineación con las tendencias de turismo responsable para minimizar su impacto ambiental. En cuanto a desafíos conjuntos entre los dos sectores se citan 1) la promoción internacional, 2) mejorar la seguridad y su percepción internacional, y 3) desarrollo de la infraestructura regional.
El repaso anterior sugiere que, en términos generales, las perspectivas de nuestro sector turístico son positivas para los próximos dos o tres años. Esto será en parte un resultado de la recuperación del turismo mundial, el cual alcanzó el pasado año los 1,300 millones de llegadas internacional representando un 88% de los niveles prepandemia. Mientras, la RD sobrepaso ese nivel en el 2023. Sin embargo, al ser el turismo una industria globalizada se requiere que sus manejadores locales estén atentos a los estándares de operación y las tendencias del mercado para alinear el producto turístico en consecuencia. No nos podemos dormir en los laureles hasta ahora conquistados.
Acento