Carlos Lehder revela la conexión entre Fidel Castro y el cartel de Medellín en una compleja red de narcotráfico hacia Estados Unidos
Bogotá, 19 de mayo de 2025. – En una serie de revelaciones que han reavivado el debate sobre las relaciones del régimen cubano con el narcotráfico internacional, el exnarcotraficante colombiano Carlos Lehder ha confirmado en su nuevo libro Vida y muerte del cartel de Medellín, así como en una entrevista con Martí Noticias, la existencia de una alianza operativa entre el cartel de Medellín —liderado por Pablo Escobar— y la dictadura cubana encabezada por Fidel y Raúl Castro.
Lehder, quien cumplió más de tres décadas de prisión en Estados Unidos y ahora reside en Alemania, se ha convertido en una fuente clave para entender el funcionamiento interno del cartel y sus redes internacionales de distribución.

Carlos Lehder
En su relato, asegura que fue él quien facilitó el contacto inicial entre Escobar y el gobierno cubano, una colaboración que habría permitido la creación de una ruta estratégica para el envío de cocaína hacia Norteamérica, utilizando el territorio cubano como punto intermedio.
“Yo fui invitado por el gobierno comunista de Cuba, por la dictadura castrista, a establecer ahí una línea de tráfico de cocaína hacia los Estados Unidos”, declaró Lehder. Según su testimonio, la propuesta de Fidel Castro no solo fue directa, sino también motivada por la intención de generar ingresos para sostener la economía cubana, sumida en una crisis constante durante los años 80.
El exnarcotraficante también señaló que, aunque se desvinculó de esta operación tras su expulsión del cartel —luego de asesinar a un empleado de Escobar—, la relación entre Cuba y el cartel no se interrumpió. Aseguró que Pablo Escobar y su primo Gustavo Gaviria continuaron con la logística del envío de cientos de toneladas de cocaína con el respaldo del régimen cubano.
Estas declaraciones han sido respaldadas por Enrique García, exoficial de la Dirección de Inteligencia de Cuba, quien abandonó su cargo por desacuerdos con las decisiones del gobierno.

García sostuvo que Fidel Castro mantuvo esta operación hasta que en 1989 se inició una investigación federal estadounidense, lo que forzó al régimen a realizar maniobras encubridoras, incluyendo la ejecución del general Arnaldo Ochoa, acusado de narcotráfico en un juicio ampliamente cuestionado por la comunidad internacional.
Martí Noticias también obtuvo una respuesta oficial del Consejo de Estado cubano en la que, lejos de negar las acusaciones, se reconoció tácitamente la relación al afirmar que “no es un secreto que el régimen comunista y corrupto de Cuba tiene vínculos de larga data con los narcotraficantes”.
La declaración también hizo referencia a la operación encubierta mediante la cual los Castro utilizaron la estructura de Manuel Noriega en Panamá para facilitar el tráfico de drogas.
Carlos Lehder, recordado por haber adquirido la isla caribeña de Cayo Norman, la cual adaptó con una pista de aterrizaje para las aeronaves del cartel, fue el primer gran capo colombiano en ser extraditado a Estados Unidos en 1987.

Arnaldo Ochoa, general cubano
En 1993, su colaboración con las autoridades estadounidenses fue crucial en el juicio contra Noriega, lo que le valió una significativa reducción de su condena inicial de tres cadenas perpetuas más 135 años.