Abinader confirma gestiones con EE. UU. para eliminar arancel del 10 % y frenar impuesto a remesas
Santo Domingo, 26 de mayo de 2025. El presidente Luis Abinader informó este lunes que su gobierno mantiene un contacto constante con la administración del presidente estadounidense Donald Trump para negociar la eliminación del arancel del 10 % que actualmente se aplica a productos dominicanos que ingresan al mercado norteamericano.
Durante su participación en La Semanal con la Prensa, Abinader detalló que República Dominicana fue uno de los primeros países en solicitar formalmente una reunión para abordar este asunto, debido a que la medida no solo impacta al país, sino también a otras naciones del Caribe e incluso posiblemente a países de Centroamérica.
El mandatario señaló que la República Dominicana seguirá luchando por la eliminación de este arancel, aunque reconoció que se trata de una decisión que depende exclusivamente del gobierno de Estados Unidos.
“Nosotros vamos a seguir luchando para que se elimine ese 10 % y estamos como el que más cada día, pero no es una decisión que se nos escapa”, afirmó Abinader al ser cuestionado por periodistas sobre el tema.
El presidente explicó además que, aunque se ha hablado de reducciones arancelarias en algunos casos, es importante entenderlo en perspectiva. Puso como ejemplo la situación de China, donde los aranceles se redujeron de un 120 % a un 40 %, lo que muestra que, en términos comparativos, los países con un arancel del 10 % todavía no han sido beneficiados con exoneraciones completas. Hasta la fecha, ningún país con esa carga arancelaria ha sido liberado del pago total, aclaró Abinader.
Más allá del tema de los aranceles, el presidente dominicano también expresó preocupación por el avance en Estados Unidos de un nuevo impuesto del 3.5 % a las remesas, aprobado recientemente en la Cámara de Representantes como parte del plan fiscal promovido por la administración Trump.
Esta medida, que aún debe ser debatida en el Senado, ha generado alarma en países como República Dominicana, que dependen en gran medida de las remesas enviadas por sus ciudadanos residentes en el extranjero.
Abinader explicó que el gobierno dominicano está monitoreando estrechamente la evolución de esta propuesta, que ha surgido en las últimas tres semanas y que también preocupa a varios países centroamericanos. Según detalló, los equipos técnicos están analizando los alcances de este impuesto, ya que parte de la legislación menciona que estaría dirigido a las remesas enviadas por inmigrantes indocumentados, lo que abre interrogantes sobre cómo se implementaría en la práctica.
“Estamos en contacto permanente con la administración del presidente Trump, tanto para el tema de las tarifas como para ese nuevo tema de las remesas, que es relativamente reciente”, aseguró Abinader.
Añadió que su gobierno está trabajando en conjunto con otros países de Centroamérica que también se verían afectados por esta medida, buscando formas de enfrentarla diplomáticamente y evitar que se traduzca en un golpe económico para las familias que dependen de esos envíos.
El presidente también admitió que la implementación de este nuevo impuesto sería compleja, especialmente en términos de cobro, debido a las dificultades para identificar qué remesas provienen específicamente de inmigrantes indocumentados. “Se está evaluando porque en una parte dice que es para los inmigrantes ilegales, pero eso es de difícil cobro”, indicó.
Las remesas son una fuente fundamental de ingresos para la economía dominicana, representando miles de millones de dólares al año que sostienen a millones de familias. Por esta razón, cualquier intento de imponer cargas adicionales a esos envíos genera preocupación en el gobierno y en los sectores económicos.
Abinader concluyó reiterando que su administración seguirá haciendo todas las gestiones posibles para proteger los intereses del país y asegurar que tanto los productores nacionales como los dominicanos en el exterior no se vean afectados de manera desproporcionada por medidas tomadas desde Washington.