Abinader abre la puerta a cambios en su gabinete y defiende nuevo Código Penal pese a críticas
Santo Domingo, 4 agosto– A pocos días de cumplirse el primer año de su segundo mandato presidencial, el presidente Luis Abinader dejó entrever que podrían producirse ajustes en su equipo de gobierno, al tiempo que defendió la promulgación del nuevo Código Penal, aún frente a las críticas por la exclusión de temas sensibles como las tres causales del aborto.
“Siempre hay posibilidad de cambio, siempre; no tienen que ser para el 16 de agosto, siempre hay posibilidad. Eso es normal, ya que es para tratar de ajustar y eficientizar el gobierno”, expresó Abinader durante su encuentro con la prensa en La Semanal, al ser cuestionado sobre eventuales modificaciones en su tren gubernamental.
El presidente no especificó cuáles funcionarios podrían ser sustituidos, aunque su más reciente movimiento fue el nombramiento de Magín Díaz como ministro de Hacienda y Economía, junto con la designación de sus viceministros, a mediados de julio.
La incorporación de Díaz, quien dirigió la Dirección General de Impuestos Internos (DGII) durante el último gobierno de Danilo Medina, generó descontento en las bases del oficialista Partido Revolucionario Moderno (PRM), desde donde han surgido reclamos por una mayor participación en la administración pública.
Militantes del PRM han manifestado sentirse relegados, a pesar de su participación activa en las dos campañas presidenciales que llevaron a Abinader al poder.
Un Código Penal “perfectible” pero necesario
En otro orden, el mandatario abordó la reciente promulgación del nuevo Código Penal, al que definió como un avance frente a un régimen legal que, hasta ahora, databa del año 1884.
“Ninguna ley es perfecta. Ninguna ley es ideal, es la posible”, sostuvo Abinader. “Repito, es perfectible, es mejorable, pero es un Código Penal donde ha habido avances, quizás no es el que yo quisiera con exactitud, pero repito ha habido avances”.
Durante su alocución, el presidente señaló que la antigüedad y las debilidades del código anterior habían permitido que delincuentes reincidentes permanecieran en libertad, generando inseguridad y violencia. “Han salido porque tenemos un código atrasado, imperfecto, y esos delincuentes son los que llevan intranquilidad y muerte a las familias”, enfatizó.
El nuevo Código Penal, promulgado como la Ley 74-25, incorpora la tipificación de delitos como el feminicidio, sicariato, ciberbullying, violencia económica, difusión de deepfakes con fines de chantaje, estafa piramidal, intermediación financiera no regulada e instigación al suicidio.
También establece el cúmulo de penas por múltiples delitos, eleva la pena máxima de prisión a 40 años e introduce medidas socio judiciales como la vigilancia posterior al cumplimiento de condena, registro de agresores sexuales y programas de reeducación para la reinserción social.
No obstante, la ley ha generado controversia debido a la exclusión de la despenalización del aborto en sus tres causales: riesgo de vida para la madre, malformaciones congénitas incompatibles con la vida y embarazo producto de violación o incesto.
Esta omisión ha sido duramente criticada por sectores feministas, organizaciones de derechos humanos y parte de la sociedad civil.