Los demócratas y su propaganda

Francisco S. Cruz

No hay que ser republicano o trumpistas para uno darse cuenta de cómo ciertos “analistas”, agencias de prensa y comunicadores “independientes” insultan la inteligencia ajena cuando hilvanan narrativas o peroratas sobre varios temas que por décadas han sido nicho político-electoral demócrata: migración, inseguridad ciudadana y aborto. Si, ¿por qué desde cuando los temas migratorio, aborto e inseguridad pública no han sido, independientemente de la administración de que se trate, tema recurrente en los Estados Unidos -masacres en las escuelas, universidades, asesinatos y atentados a presidentes, facilidades legales-constitucionales para la adquisición de armas -al respecto, hay que legislar para reforzar los controles- y etcétera?

Si es sobre el tema migratorio no podemos obviar, ¿quién fue conocido con el mote de “deportador en jefe”, siendo presidente -y los republicanos no explotaron políticamente esas iniciativas o repatriaciones-? ¿Cuál fue el azar en materia migratoria en la pasada administración demócrata -y cuando más se agravó el fenómeno-? ¿Cuál partido a abogado por la defensa del aborto a rajatablas y más allá de las tres caudales? Y encima, ¿cuál partido ha elevado a política de Estado o pública lo que debería ser materia de privacidad o de preferencia sexual individual? Y por último, ¿qué partido ha fomentado más, en las escuelas y espacios públicos, la agenda de género? Sin duda, el partido Demócrata.

Y si es la inseguridad ciudadana o el crimen ahora es narrativa periodística-mediática colindante con el partido demócrata haciendo cuasi propaganda política cuando se combate el crimen y lo desvían, aviesamente, hacia el tema migratorio. Igual, ¿desde cuándo no operan los “lobos solitarios”, de ambos bandos partidarios y no pocas veces desde una salud pública mental en déficit o crisis desde hace décadas?

Entonces, ¿por qué, de golpe y porrazo, como si fuéramos tontos útiles, se nos quiere insultar la inteligencia? Cuanto todos sabemos lo que está en juego: las elecciones de medio término y revertir la correlación de representación política en ambas cámara y punto.

Finalmente, el que ingresa a un país, cualquiera, sin tramitar una visa, eso tiene un nombre, respetándole sus derechos humanos y el debido proceso, violación a su frontera y a las leyes migratorias….: O, acaso trate algún extranjero de ingresar a China o Rusia vía irregular sin tramitar visas y verás como les va….(por supuesto, ni China ni Rusia -a propósito, la migración que se da en ambos países es ínfima y por vecindario geográfico o, en el caso de Rusia, proveniente de ex países de la desaparecida Unión Soviética- tienen los atractivos económicos o de libertades públicas, como los Estados Unidos, por ser regímenes totalitarios o sociedades cerradas).

Y que conste, no estoy defendiendo todas las iniciativas del presidente Donald Trump, pues soy partidario de una reforma migratoria para todos aquellos que califiquen, no hayan delinquido y no sean cargas públicas. Tampoco estoy de acuerdo con la histórica política migratoria de criminalizar las migraciones ni mucho menos basados en estereotipos socioculturales o discriminación étnico-racial.

No obstante, el tema o fenómeno global migratorio ya tiene mucha repulsa en todo el mundo; y esa nueva realidad no la podemos tapar con un dedo: el fenómeno es global….; pero hacer política del tema es estrategia demócrata de doble moral política porque una vez en el poder no hacen ni hicieron nada…! Dejémonos de cuentos chinos…!

El Caribe

Comentarios
Difundelo