Trump negó haber empleado un insulto sobre Haití y naciones africanas. Ahora se jacta de ello
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, admitió el martes que utilizó el término despectivo “países de mierda” para referirse a Haití y a naciones africanas durante una reunión en 2018 con legisladores, jactándose de un comentario que provocó indignación global durante su primer mandato.
En aquel entonces, Trump había negado haber hecho la declaración despectiva durante una reunión a puerta cerrada, pero el martes mostró poco remordimiento al repetirla durante un mitin en Pensilvania. Continuó despreciando a Somalia como “inmundo, sucio, repugnante, plagado de crimen”.
Trump se jactaba en su discurso de que la semana pasada había “anunciado una pausa permanente en la migración del Tercer Mundo, incluyendo de lugares infernales como Afganistán, Haití, Somalia y muchos otros países”, cuando alguien en la multitud gritó el comentario de 2018.
Eso lo llevó a recordar el incidente de 2018. Su relato se ajustó estrechamente a la descripción ofrecida en ese momento por personas que tenían conocimiento sobre la reunión en la Oficina Oval.
“Tuvimos una reunión y dije: ‘¿Por qué es que sólo aceptamos gente de países de mierda, verdad? ¿Por qué no podemos tener a algunas personas de Noruega, Suecia?’”, dijo Trump a los asistentes al mitin.
“Pero siempre aceptamos gente de Somalia”, continuó. “Lugares que son un desastre. Inmundo, sucio, repugnante, plagado de crimen”.
La Casa Blanca en ese momento no negó los comentarios de Trump, pero el presidente publicó en Twitter al día siguiente de que se conociera la noticia que “este no fue el lenguaje que usé”. Añadió que “nunca dijo nada despectivo sobre los haitianos”.
En 2018, los comentarios de Trump denigrando a naciones predominantemente negras mientras buscaba más migración de países predominantemente blancos fueron ampliamente condenados como racistas. Algunos republicanos del Congreso condenaron los comentarios, y los líderes extranjeros se indignaron. El gobierno de Botsuana convocó al embajador de Estados Unidos, y el presidente de Senegal, Macky Sall, dijo que estaba sorprendido y señaló que “África y la raza negra merecen el respeto y la consideración de todos”.
Pero desde entonces, Trump ha rebasado muchas normas y tradiciones de decoro que habían guiado a sus predecesores, tanto en su primer mandato como en los años posteriores. A menudo salpica sus comentarios públicos con palabrotas, y este año ha empleado una en dos ocasiones mientras las cámaras estaban grabando.
En Acción de Gracias, en un par de extensas publicaciones en redes sociales quejándose sobre los inmigrantes, menospreció al gobernador de Minnesota, Tim Walz, usando un término despectivo anticuado para referirse a personas con discapacidad intelectual. Cuando un reportero le preguntó si mantenía un comentario que muchos estadounidenses consideran ofensivo, Trump no mostró arrepentimiento. “Sí. Creo que le pasa algo malo”, dijo. AP

