Jesús es la verdadera Navidad

 Euri Cabral

En estos tiempos se ha trastocado la esencia de casi todas las cosas, los antivalores han pasado a desplazar los valores, la vulgaridad camina más rápida que la decencia, la insensatez vence lo sensato, en fin, hemos perdido lo esencial y prevalece lo inmediato y sin esencia. Con la Navidad se ha estado produciendo un fenómeno en los últimos años, que ha provocado que muchos hayan perdido el verdadero sentido de ese acontecimiento, que tiene una esencia básicamente espiritual. Como en la actualidad todo se mide por el nivel de movimiento económico, de fiestas a todos los niveles, de repartos de dinero y de comida, la Navidad se ha convertido en un acontecimiento donde lo material se impone a lo espiritual. Y de esa manera se está actuando totalmente contrario al verdadero sentido de la navidad. Porque la esencia de la Navidad es celebrar el nacimiento de Jesús, el hijo de Dios que vino a salvar a la humanidad.

La Navidad es una fecha escogida por los seguidores de Jesús para celebrar el nacimiento del hijo de Dios que vino a la tierra para pagar por nuestros pecados y garantizarnos la vida eterna. Aunque ciertamente no existen pruebas irrefutables de que Jesús naciera un 25 de diciembre, esa fecha fue escogida por el emperador Constantino en los momentos de consolidación de la doctrina cristiana y se ha mantenido a lo largo de la historia como la fecha donde, en un humilde pesebre de Belén, vino al mundo el mesías enviado por Dios para redimir a la raza humana. En Juan 3:16 se dice con absoluta firmeza que “tanto amó Dios al mundo que dio a su hijo unigénito, para que todos el que cree en él no se pierda, sino que tenga vida eterna”.

Partiendo de ese hecho la navidad debe ser un motivo de profunda alegría y celebración del nacimiento de Jesús, un momento para nosotros pensar en su vida, en sus hechos, en sus parábolas, en sus acciones para difundir la verdad de Dios y hacer que nosotros cada día seamos más como él. Y no es que dejemos de celebrar con moderación en este tiempo de fiestas y alegrías, lo que no debemos es perder la noción real de las cosas y creer que el sentido de la navidad es la fiesta pagana y no la reflexión cristiana.

Si quieres sentir y vivir a plenitud el verdadero sentido de la navidad te exhorto a que cuando te sientes con tu familia en la cena de Nochebuena y de Año Nuevo, le des gracias a Jesús por permitirte vivir a plenitud y por hacer posible que tu familia esté a tu lado celebrando en esta fecha. Y si estás pasando por un momento difícil de pérdida de algún familiar, o alguien en tu alrededor esta sufriendo por algo igual, levanta tus oraciones a Dios y ten en cuenta que él es siempre tu mejor compañía y quien te consuela con mayor efectividad en esos momentos difíciles.

La Navidad debe ser un momento para acercarnos mucho más a Jesús, el hijo de Dios que entregó su vida para salvarnos. La Navidad debe ser una época para hablar con nuestros familiares y dar gracias eternas a Dios por darnos la vida, los talentos y valores que nos permiten crecer cada vez más. La Navidad debe ser un espacio de amar y agradecer, de orar y de perdonar, de celebrar con alegría que Dios nos ha dado tantas cosas, y que su gracia nos protege y nos da vida en abundancia.

En la actualidad nuestra nación atraviesa por momentos de mucha indignación y dolor por el caso de Senasa, que ha llevado a que tanto en el gobierno como en la sociedad en general, haya una amplia pesadumbre que nos lleva a olvidar que la Navidad es época de reflexionar, de celebrar, de unirnos, de querernos y de buscar la justicia De Dios. No permitan que ni el dolor ni la indignación, ni las fiestas o parrandas sin control, ni la bebida, ni los mejores regalos que puedan recibir, les quiten la atención sobre el verdadero significado de la Navidad, que es Jesús.

La Navidad debe ser un momento para celebrar con alegría el nacimiento del hijo de Dos, y recordar sus enseñanzas y su ejemplo. Una época para tener presente que Jesús es la verdadera esencia de la Navidad y el modelo que debemos imitar, cuyo paso por este mundo estuvo basado en un profundo amor, en una gran sentido de justicia y solidaridad, en mucha humildad y en una gran capacidad para perdonar.

Euri Cabral

Es Economista y Comunicador

[email protected]

Comentarios
Difundelo