A 38 años, el amor es una decisión

Por Euri Cabral

Este jueves 19 de diciembre cumplo y celebro con mucha alegría, 38 años de casado con Zinayda Rodríguez, la mejor esposa del universo. El matrimonio no es una tarea fácil. Mantener el amor, lcomprensión y la pasión encendidas mientras transcurren los años, es el mayor reto de los matrimonios en este tiempo y en todas las épocas de la humanidad.

En nuestro caminar en el sendero de Jesús, hemos aprendido que el amor no es solamente un sentimiento, sino que es una decisión. En la Biblia, en 1 de Corintios capítulo 13, encontramos una sencilla, pero al mismo tiempo, una profunda y precisa definición de lo que es y debe ser el amor.

Los versículos del 4 al 8, que son conocidos por mucha personas en el mundo aunque no sean cristianos, dice lo siguiente: «El amor es paciente, es bondadoso, el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no es arrogante, no se porta indecorosamente; no busca lo suyo, no se irrita, no toma en cuenta el mal recibido, no se regocija de la injusticia, sino que se alegra con la verdad; todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta. El amor nunca deja de ser…».

Para muchos cristianos y hasta para  personas que no conocen la Biblia, ese texto de 1 de Corintios es un verdadero tratado sobre el amor, es una visión amplia y sincera de ese sentimiento que fue creado por Dios, para hacer que los seres humanos puedan tener en ellos una de las principales cualidades de su creador.  Y es que, como muy bien dice la primera epístola de Juan en el capítulo 4 versículo 8, «el que no ama no ha conocido a Dios, porque Dios es amor». 

Lo reitero: El amor no es solamente un sentimiento, el amor es una decisión. Para que un matrimonio o una relación de noviazgo funcione, cada uno de los que participan en ella deben tomar la decision de amarse por encima de todo. Debemos entender, como muy bien dice nuestro pastor Raffy Paz, que un matrimonio es una relación de dos personas imperfectas teniendo como base a Dios, que es perfecto.

Para que en nuestros matrimonios podamos ser pacientes, bondadosos, no ser jactanciosos, no tener envidia, no ser arrogantes, para alegrarnos con la verdad,  para poder vivirlo todo, sufrirlo todo, esperarlo todo y soportarlo todo, debemos tomar la decisión de amar y tener a Dios como la base de esa decisión. Cuando iniciamos nuestra relación de pareja siempre estamos super enamorados, todo es muy bueno y parece que los conflictos no vendrán, pero siempre llegan y nos acompañan. La clave está en saber que el «enamoramiento inicial» no es amor.

El verdadero amor se construye día a día, momento a momento, detalle a detalle, segundo a segundo. Por eso el amor es una decisión. Decidimos amar a nuestra esposa sabiendo que ella no es perfecta ni nosotros tampoco. Que ella tiene muchas virtudes y muchas debilidades, igual que nosotros. Y que uno debe ser el complemento y el estímulo del otro, para seguir haciendo crecer el amor cada día.  Esto lo digo por experiencia propia vivida durante estos 38 años casado con Zinayda Rodríguez, que alegremente celebro y disfruto este 19 de diciembre. Zinayda es el mejor regalo que me ha dado Dios para que mi vida tenga sentido. Con ella he vivido y superado todos las situaciones.

Han sido 456 meses; 13,680 días; 328,320 horas y 19 millones 699,200 minutos tomando la decisión de amar y perdonar de manera permanente. Hemos podido lograrlo porque tenemos a Dios como base de nuestra matrimonio. Una relacion de amor puede superar todas las situaciones difíciles y hacer del matrimonio una luna de miel permanente, si tiene a Dios como guía y soporte. Solo así «el amor nunca deja de ser». Gracias, Señor, por haberme dado a Zinayda como mi compañera en la ruta del amor.

Comentarios
Difundelo