Abinader califica de exitoso paso de la misión MSS a una fuerza contra pandillas en Haití
Santo Domingo, 1 de octubre — El presidente Luis Abinader manifestó con satisfacción el avance diplomático logrado con la reciente transformación de la Misión Multinacional de Apoyo a la Seguridad en Haití (MSS) en una Fuerza de Supresión de Pandillas, que contará con 5,500 efectivos.
En su mensaje oficial, el jefe del Estado dominicano resaltó el rol activo que ha desempeñado la República Dominicana en este proceso y subrayó el compromiso del país por impulsar la paz y la estabilidad en la región.
“La República Dominicana se siente orgullosa de haber contribuido a este esfuerzo y seguirá trabajando para promover la paz y la estabilidad en la región”, afirmó Abinader al comunicar la decisión del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas, que finalmente atendió el reclamo dominicano frente a lo que se ha considerado la “ineficacia” de la MSS.
A través de un comunicado oficial, el mandatario celebró que el organismo internacional —“finalmente”— haya dado respuesta a la demanda del gobierno dominicano. Enfatizó que, dada la insuficiencia de la actual misión de apoyo a la policía haitiana, resultaba urgente una reconfiguración.
Trabajaremos por una acelerada transición de la MSS a la nueva fuerza de supresión de pandillas en Haití y, en ese sentido, le daremos estrecho seguimiento a dicho proceso”, recalcó.
Abinader puntualizó que el Estado dominicano jugó un papel esencial al liderar, junto con aliados internacionales, un esfuerzo concertado para lograr este cambio. En ese contexto, reconoció la participación de los expresidentes Leonel Fernández, Hipólito Mejía y Danilo Medina, quienes firmaron con él una carta dirigida a los quince jefes de Estado que componen el Consejo de Seguridad de la ONU, con el propósito de sensibilizar sobre la crisis haitiana y la necesidad de una respuesta más potente.
Durante su intervención en la Asamblea General de las Naciones Unidas, Abinader instó a los países miembros del Consejo a aprobar sin demora el proyecto de resolución presentado por Estados Unidos y Panamá, que propuso la transición de la MSS —cuyo mandato expiraba el 2 de octubre— hacia la nueva estructura operativa.
Según el presidente, esta nueva Fuerza no será una estructura genérica: estará dirigida y financiada por expertos de la ONU, con un mandato fuerte y claro para restablecer el orden y garantizar la seguridad en Haití. La supervisión política será estrecha y la planificación logística y operativa —dijo— se ejecutará de forma meticulosa para asegurar la eficacia del despliegue.
Abinader recordó que desde 2021 el gobierno dominicano ha venido colaborando con la comunidad internacional para buscar soluciones estructurales a la persistente crisis haitiana. Hoy, aseguró, la aprobación de esta resolución representa un paso trascendental hacia la recuperación del Estado haitiano, con impactos esperados tanto en lo social, como en lo político y lo económico no solo en Haití, sino en toda la región.
El texto de la resolución otorga un mandato sólido y amplio a la nueva fuerza, dejando en manos de expertos de Naciones Unidas los aspectos técnicos, logísticos y operacionales. Asimismo, el financiamiento de la operación correrá por cuenta del presupuesto de la ONU, lo cual, según Abinader, garantiza mayor estabilidad institucional y operativa.
“Finalmente, agradecemos a todos los miembros del Consejo de Seguridad por la adopción de esta resolución y en particular a Estados Unidos y Panamá, países que lideran el tema de Haití en ese Consejo”, culminó el presidente dominicano.
Horas después del anuncio, el canciller Roberto Álvarez compartió vía su cuenta en la red social X su entusiasmo por el logro diplomático. Calificó como motivo de regocijo nacional la aprobación de la propuesta liderada por EE. UU. y Panamá, que transforma la MSS en una fuerza especializada de 5,500 uniformados —lo que significa una capacidad hasta cinco veces superior a la de la misión anterior.
Álvarez destacó además el esfuerzo que realizó la diplomacia dominicana dentro del grupo de países aliados para alcanzar el respaldo mayoritario. Recalcó que la logística y operación de la futura fuerza estarán a cargo de especialistas de las Naciones Unidas que asumirán la financiación y el mando técnico, bajo un mandato claro para restablecer el orden en Haití bajo supervisión política.
La resolución presentada por EE. UU. y Panamá fue aprobada con 12 votos favorables y 3 abstenciones, sin votos en contra. Con esta medida se sienta la base legal para la creación de una nueva fuerza de represión contra las pandillas que han desestabilizado Haití en los últimos años.
Este giro diplomático responde también al informe de que la MSS, liderada por Kenia, ha enfrentado dificultades desde su creación: insuficiencia de financiamiento, fallas operativas y un número de efectivos inferior al planeado.
En su análisis más amplio, este cambio representa un reconocimiento implícito de que la violencia de pandillas ha alcanzado niveles en los que las misiones tradicionales ya no resultan eficaces. La nueva fuerza será (o al menos aspira a ser) más robusta, con mandato claro para neutralizar, aislar y disuadir a los grupos armados que dominan amplias zonas en Haití.
Para República Dominicana, este desenlace es estratégico: implica una participación más decisiva en la gestión de la seguridad regional, reforzando la idea de que la estabilidad de la isla La Española no puede separarse de la de su vecino.
En su discurso, Abinader dejó claro que el compromiso dominicano continuará más allá de lo diplomático: habrá seguimiento y exigencia de cumplimiento a lo acordado con sus aliados.
Con la aprobación de esta nueva fuerza —concebida con mayor recursos y mandato—, se abre una nueva etapa en la política internacional hacia Haití. Desde Santo Domingo, el gobierno asume como propia una misión que es de toda la región: estabilizar un país que funciona como escenario de una grave crisis humanitaria, política y de seguridad, cuyos efectos trascienden sus fronteras.
República Dominicana, en ese marco, aspira a ocupar un lugar central en el esfuerzo colectivo por restaurar el orden y propiciar un cambio real en la vecina nación.
Qué paises formarían parte de esta fuerza?
No se ha encontrado un listado oficial definitivo en fuentes confiables que confirme todos y cada uno de los países que integrarían la Fuerza de Supresión de Pandillas en Haití según la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.
Sin embargo, se pueden extraer indicios y corroborar algunos países que ya participaban o habían anunciado su contribución a la misión precedente (MSS) o al nuevo esquema, con lo cual podrían ser también parte del nuevo cuerpo:
Países que se mencionan como posibles o actuales contribuyentes
- Kenia — era la nación líder de la misión MSS y se prevé que continúe su participación en la transición. Reuters+4securitycouncilreport.org+4Anadolu Ajansı+4
- Jamaica — ya estaba aportando personal a la misión MSS. Wikipedia+1
- Bahamas — igualmente figura entre los países que habían comprometido efectivos en la misión MSS. Wikipedia
- Guatemala — personal guatemalteco ha sido desplegado para reforzar la misión actual. Wikipedia
- El Salvador — también ha participado con contingentes en el marco de la misión MSS. Wikipedia
- Estados Unidos y Canadá — en algunos reportes se menciona que el liderazgo del nuevo esquema podría incluir a representantes de estos países. Reuters
Adicionalmente, en artículos sobre el nuevo proyecto de resolución se menciona que la estructura del liderazgo de la fuerza puede involucrar “representantes de los países que han contribuido con personal” más EE. UU. y Canadá.
Qué se sabe con certeza hasta ahora
- La resolución fue respaldada por Estados Unidos y Panamá como países promotores del proyecto.
- El texto prevé que el nuevo cuerpo opere bajo un mandato robusto de la ONU, con expertos de Naciones Unidas encargados de los aspectos logísticos y operativos.
- Además, la misión MSS anterior (ahora transformada) contaba ya con aportes de los países citados