Abinader defiende su propuesta de reforma constitucional pese a críticas

Santo Domingo, 13 agosto – El presidente Luis Abinader, a pesar de las críticas y advertencias de partidos opositores, asociaciones de fiscales y dos exprocuradores, mantiene una firme defensa de su propuesta de reforma constitucional, la cual, según él, tiene como objetivo «apuntalar la democracia» en la República Dominicana.

Durante su intervención en La Semanal del lunes, el mandatario subrayó que esta propuesta, enfocada en cuatro puntos clave, busca únicamente “institucionalizar” el país.

Abinader expresó su desconcierto ante las reacciones adversas, insinuando que los opositores no comprenden el propósito de las modificaciones propuestas por el Poder Ejecutivo a la Carta Magna. Según él, estas modificaciones son necesarias para fortalecer la institucionalidad, diferenciando su enfoque del de líderes pasados que, en sus palabras, buscaban perpetuarse en el poder o eliminar las restricciones a la reelección.

Abinader insistió en que no busca ningún tipo de «beneficio político» con esta reforma. Rechazó las acusaciones sobre la posibilidad de que la reforma esté motivada por intereses personales o políticos, calificándolas de “inventos”.

En particular, defendió la propuesta de un nuevo modelo para la elección del procurador general de la República, que implicaría un mandato de cuatro años para garantizar la gobernabilidad. Esta propuesta, según el mandatario, también implicaría un cambio constitucional para evitar que el procurador sea un miembro del partido gobernante, como ha ocurrido en el pasado.

El presidente sostuvo que la oposición política se resiste a aceptar que la reforma fortalecerá la democracia en el país. Según Abinader, la dificultad de la oposición para comprender o aceptar esta reforma radica en que ellos actuarían de manera diferente si estuvieran en el poder.

El enfoque del mandatario es, por tanto, uno que busca reforzar las bases democráticas del país, aunque esto no sea reconocido por sus adversarios.

La propuesta del Poder Ejecutivo incluye varios cambios significativos, entre ellos la creación de un artículo que haría más difícil modificar los actuales términos de la elección presidencial y la inclusión de un transitorio que impediría a Abinader postularse nuevamente.

También propone que la elección del procurador general de la República se realice a través del Consejo Nacional de la Magistratura. Además, plantea unificar las elecciones presidenciales, congresuales y municipales para que se celebren el mismo día a partir del 2032, y reducir el número de miembros de la Cámara de Diputados, lo que dejaría la matrícula de la cámara baja en 137 legisladores.

No obstante, la propuesta de reforma ha sido objeto de críticas, especialmente por parte de fiscales y otros juristas que advierten sobre sus posibles implicaciones para la estructura y autonomía del Ministerio Público.

En particular, se ha señalado que la reforma podría eliminar de facto al Consejo Nacional del Ministerio Público. Esto se debe a la propuesta de eliminar el artículo 178 de la Constitución, que establece la composición del Consejo del Ministerio Público, encabezado por el procurador general de la República y otros representantes del sistema judicial elegidos por sus pares.

En su lugar, la reforma plantea que una ley definirá el funcionamiento y la organización del Consejo Superior del Ministerio Público como órgano de gobierno interno.

A pesar de las críticas, Abinader continúa promoviendo su propuesta como una vía para fortalecer las instituciones democráticas del país. Sostiene que su enfoque es necesario para asegurar que la República Dominicana avance hacia un sistema más institucionalizado y menos vulnerable a los intereses políticos particulares

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