Abinader venció vacilación de los que no querían la Cumbre
Guarionex Rosa
La reunión en el ministerio de Defensa entre el presidente Abinader, los ex presidentes Mejía, Fernández y Medina fue un hito histórico para comprender la gravedad de la situación de Haití, amenazada por bandas armadas que tienen su hoja de ruta para hacerse con el poder.
Abinader había ofrecido desde su primer cuatrienio reunir a las fuerzas políticas representadas por esos líderes para entre todos asumir el serio problema que representa la situación política y social explosiva del vecino país, azotado por la violencia de las bandas.
La buena voluntad del gobernante venció cierta vacilación de quienes querían evitar la cumbre política en el Palacio Nacional, no obstante que Abinader no está en campaña para las elecciones del 2028 en las cuales, lo ha dicho varias veces, no competiría.
Sabio y dispuesto a que los ex presidentes conocieran las razones de su preocupación por los problemas haitianos, que en alguna medida podrían afectar a la República Dominicana, escogió el ministerio de las Fuerzas Armadas, un sitio neutral y apartado del partidarismo.
Negarse a asistir a la reunión de alto nivel del presidente Abinader y sus antecesores en el Poder Ejecutivo habría sido mal visto por el público, toda vez que las Fuerzas Armadas mantienen su apoliticidad como lo señala la Constitución y son quienes sostienen la seguridad fronteriza.
Con razón el presidente Abinader ordenó que estuviesen presentes el ministro de Defensa, Carlos Fernández Onofre y el canciller Roberto Álvarez, quienes explicaron en reunión separada con los ex presidentes y otros jefes militares, las medidas que se han estado adoptando.
El general Fernández Onofre y los jefes del Ejército, la Armada y la Fuerza Aérea de la RD se han mantenido en una actitud de alerta aumentando el patrullaje en la zona fronteriza y en mar y aire ante la amenaza directa de los criminales haitianos. Migración continúa las expulsiones.
Abinader notificó a los ex presidentes Mejía, Fernández y Medina información extremadamente confidencial que no han surgido a la luz pública y decidió tener encuentros bilaterales con ellos en el futuro según la situación lo amerite. Un comunicado confirmó los acuerdos.
“Por encima de las diferencias políticas, se impone el deber patriótico de proteger la soberanía, la estabilidad y la democracia del país”, señala el documento leído por Homero Figueroa y Daniel García Archibald, representantes del presidente Abinader, junto a Omar Liriano y Natanael Concepción, de Fernández y Héctor Olivo y Joselito Féliz, del PLD.
El régimen dominicano conoce bien que en la hoja de ruta de las bandas criminales que encabeza Vivre Ensemble (Vivir Juntos), de Jimmy Chérizier, alias Barbecue, está el asalto al Banco Central, al Palacio Nacional, a la embajada de los Estados Unidos y a la Policía Nacional de Haití (PNH).
La semana que termina hubo un sabotaje a la presa de Peligre, la principal de Haití, que dejó a Puerto Príncipe y sus vecindarios en tinieblas. Chérizier ha amenazado con extender la lucha de las bandas hasta el lado dominicano, lo que al parecer motivó el aumento de soldados dominicanos en la frontera.
En su segunda estocada estaría el asalto a Cabo Haitiano, que como en los primeros años de la independencia del país se apartó del régimen de Puerto Príncipe. Ahora la ciudad del Cabo y sus vecindades funciona mínimamente bien con su puerto y aeropuerto internacional abiertos. Listín Diario