Advierten sobre conflictos por la demanda de agua y critican la política de deforestación de Haití
Santo Domingo, 2 de octubre – El ingeniero geólogo Osiris de León planteo la necesidad de llevar a cabo un inventario de los caudales de los cuatro ríos fronterizos: Masacre, Capotillo, Artibonito y Pedernales, así como de sus usos actuales, con el fin de definir de manera transparente y colaborativa cómo aprovechar el 50% de estas aguas en cada país.
De León advierte que la presión por el agua en la región fronteriza aumentará, especialmente con los efectos del cambio climático que traen consigo sequías más severas. Por lo tanto, se necesita un plan integral de gestión de recursos hídricos en la zona.
Según sus palabras: «A futuro, la zona del Masacre y del Artibonito será muy difícil, y República Dominicana tiene que buscar una solución ahora».
En relación con el conflicto por la construcción de un canal para desviar las aguas del río Masacre hacia Haití, De León señala que este es solo el comienzo de otros conflictos similares, ya que Haití se ha quedado sin agua debido a la deforestación de sus bosques. Además, los habitantes de Juana Méndez y Dajabón también presionarán por el acceso al agua.
Además, De León revela que República Dominicana tiene planes de construir cuatro presas en el río Artibonito, lo que generará protestas por parte de la población haitiana. Esta obra afectará a los agricultores dominicanos en las comunidades de Cañongo, La Vigía, Manzanillo y la Colonia Japonesa.
De León rechaza las afirmaciones del investigador haitiano Maismy-Mary Fleurant, quien acusó a la República Dominicana de querer imponer un uso exclusivo del agua del río Masacre. De León argumenta que Haití siempre ha utilizado de manera casi exclusiva las aguas del río Artibonito, que tiene un caudal 18 veces mayor que el río Masacre. Además, señala que Haití cuenta con una presa en el río Artibonito, lo que contradice la idea de que República Dominicana está negando el acceso al agua de manera unilateral.
El ingeniero cuestiona los datos proporcionados por Fleurant, que atribuyen un caudal de 5 metros cúbicos por segundo al río Masacre, basados en un estudio de ingenieros estadounidenses de 1999. De León argumenta que este dato es falso y que los haitianos están inflando deliberadamente el caudal del río Masacre para justificar la construcción del canal.
De acuerdo con De León, Haití está intentando extraer entre 1.5 y 3.0 metros cúbicos por segundo del río Masacre, a pesar de que este río tiene un caudal de menos de 2 metros cúbicos por segundo durante nueve meses del año. Además, De León destaca que el canal unilateral excavado en Juana Méndez viola el Tratado de Paz firmado en 1929 entre República Dominicana y Haití, ya que solo un tramo de 2 kilómetros del río Masacre entra en Haití, lo que no le otorga propiedad sobre todo el río.
En cuanto a la rehabilitación del canal de La Vigía, utilizada como alternativa por el gobierno dominicano para llamar a la reflexión y conversación a las autoridades haitianas, De León informa que esta opción ha tenido efecto en algunos haitianos que ahora la rechazan.
De León recuerda que República Dominicana planteó a Haití en julio de 2021 el respeto al Tratado de 1929 y proporcionó detalles técnicos y estudios preliminares de impacto ambiental y social. Además, destacó la necesidad de concertación entre las partes y la importancia de no mudar el agua.