Atropello masivo en Magdeburgo: un arresto, advertencias previas y el foco sobre la migración
El sospechoso, identificado como Taleb A., ahora permanece bajo custodia en Alemania enfrentando cargos de asesinato e intento de asesinato. Su perfil no se ajusta al de un atacante extremista religioso. Se describe como un exmusulmán crítico del islam y, además, ha manifestado en redes sociales su apoyo al partido de extrema derecha antiinmigrantes Alternativa para Alemania. Esto ha reavivado el debate sobre la inmigración en un contexto político marcado por las elecciones previstas para febrero.
Alemania, 22 diciembre – Fue detenido el sospechoso de matar a cinco personas y herir a 200 en un atropellamiento múltiple en un mercado navideño en Magdeburgo, informó la policía alemana este domingo.
Las autoridades descartan, por ahora, que se trate de un ataque islamista. Según la policía, el perfil del detenido muestra afinidad con ideas promovidas por el partido de extrema derecha Alternativ für Deutschland, (Alternativa para Alemania, AFD).
Identificado por la prensa como Taleb A., enfrenta cargos de asesinato e intento de asesinato. De 50 años y origen saudita, el hombre permanece bajo custodia.
Un juez ordenó su prisión preventiva tras una audiencia en la que la Fiscalía presentó cargos por cinco homicidios y múltiples intentos de homicidio, además de lesiones graves. Las víctimas mortales incluyen a un niño de 9 años y cuatro mujeres de entre 45 y 75 años, según el comunicado policial.
Entra las personas que resultaron heridas, “41 están en estado crítico o muy grave, por lo que no se descarta que aumente la cifra de muertes”, indicó Ronni Krug, representante de Magdeburgo.
No es la primera vez que pasa
Las investigaciones iniciales indican que actuó solo; sin embargo, la principal incógnita tras el ataque es cómo el sospechoso logró ingresar al mercado navideño con su vehículo, un BMW negro.
Hace ocho años, un atentado islamista en un mercado navideño en Berlín, donde un camión arrolló a la multitud, llevó a reforzar las medidas de seguridad. Desde entonces, se instalaron bloques de hormigón en muchas plazas, incluida la del mercado de Magdeburgo, para prevenir incidentes similares. Sin embargo, estas barreras no evitaron el acceso en esta ocasión, ya que el hombre usó carriles de emergencia desprotegidos para ingresar al mercado navideño.
La primera llamada de emergencia llegó a la policía a las 19:02. Tres minutos después, a las 19:05, el atacante fue detenido.
Durante el ataque, recorrió 400 metros en el mercado navideño, maniobrando para atropellar a la mayor cantidad de personas. Su captura fue rápida porque, tras salir de la plaza, su vehículo quedó atrapado en el tráfico de la calle adyacente.
El jefe de la Oficina Federal de Policía Criminal de Alemania, Holger Münch, reveló en una entrevista con la cadena ZDF que su oficina recibió una alerta de Arabia Saudita en noviembre de 2023. Esto motivó el inicio de «medidas de investigación apropiadas», según explicó el funcionario.
“El hombre publicó numerosos mensajes en Internet, tuvo contacto con varias autoridades y lanzó insultos e incluso amenazas. Sin embargo, no había antecedentes de actos violentos”, añadió Münch, cuya oficina se compara con el FBI en Estados Unidos. Señaló que las advertencias recibidas eran demasiado vagas.
La Oficina Federal de Migración y Refugiados también confirmó que recibió una pista sobre el sospechoso a finales del verano pasado. «Se tomó en serio, como todas las denuncias», afirmó la institución, que aclaró que no tiene funciones investigativas y remitió la información a las autoridades competentes sin ofrecer más detalles.
Por su parte, el Consejo Central de Exmusulmanes expresó su conmoción por el ataque en un comunicado, señalando que el sospechoso los había «aterrorizado» durante años.
“Aparentemente compartía las ideas del espectro ultraderechista de la AfD y creía en una conspiración a gran escala destinada a islamizar Alemania. Sus ideas delirantes llegaron tan lejos que asumió que incluso las organizaciones críticas con el islamismo formaban parte de la conspiración islamista”, afirma el comunicado.
Mina Ahadi, presidenta de este grupo, afirmó que “al principio sospechamos que podría ser un topo del movimiento islamista. Pero ahora creo que es un psicópata que se adhiere a ideologías conspirativas de ultraderecha”.
Taleb A., nacido en Hufuf, Arabia Saudita, en 1974, llegó a Alemania en 2006 con un pasaporte y visado legal. Su propósito era especializarse en psiquiatría tras completar sus estudios de medicina en su país.
En 2013, fue multado en Rostock por amenazas después de que las autoridades alemanas no reconocieran parte de su formación médica. Esta sanción no impidió que, en 2016, obtuviera asilo en Alemania. En su solicitud, afirmó que enfrentaba riesgo de ejecución en Arabia Saudita por haberse apartado del islam, citando un presunto incidente con el agregado cultural de su embajada.
Taleb trabajaba como psiquiatra en un hospital en Bernburgo, a 45 kilómetros de Magdeburgo, donde se encargaba de la rehabilitación de criminales con adicciones. Además, ganó notoriedad como crítico del islam y activista, ayudando a mujeres saudíes a escapar de su país y buscar asilo en Alemania.
Con el tiempo, su rechazo al islam tomó un giro extremista. Adoptó teorías que acusaban a la excanciller Angela Merkel de promover un supuesto plan para islamizar Europa. Sus entrevistas publicadas en medios como el Frankfurter Rundschau y el Frankfurter Allgemeine han sido rescatadas, ahora con su apellido oculto.
«Como en Alemania no existe la pena de muerte Angela Merkel debe pasar el resto de su vida en la cárcel por su criminal proyecto secreto de islamizar Europa. Pero si la pena de muerte se reimplanta merece que la maten», dijo en X el 5 de diciembre.
La fiscalía ha mantenido cautela sobre los motivos de Taleb A., limitándose a confirmar que uno de ellos podría estar relacionado con su descontento por el trato a los refugiados saudíes en Alemania.
Un episodio peculiar ocurrió en febrero de 2024, cuando Taleb A. acudió a una comisaría en Berlín para presentar una denuncia. Insatisfecho con el trato de los agentes, llamó a los bomberos solicitando asesoría jurídica, un uso indebido de los servicios de emergencia, que le valió otra multa.
Para ese entonces, Taleb A. parecía mostrar signos de un delirio persecutorio, alimentado por fuentes ultraderechistas. Sus redes sociales reflejan admiración por figuras controvertidas como Elon Musk, el agitador estadounidense Alex Jones y el extremista británico Tommy Robinson.
Según las autoridades viajó varias veces de Bernburg a Magdeburgo en noviembre y diciembre, alojándose en el Hotel Maritim. Se sospecha que estas visitas tuvieron como objetivo estudiar el área y planificar el ataque.
La migración de vuelta al debate
El reciente ataque en Magdeburgo vuelve a poner las medidas para la inmigración en el centro del debate en Alemania. Con elecciones anticipadas previstas para el 23 de febrero, el tema se ha venido intensificando tras otro acto de violencia en agosto, cuando un ataque con cuchillo en Solingen llevó al gobierno del canciller Olaf Scholz a reforzar la seguridad fronteriza.
Figuras de derecha en Europa aprovecharon la tragedia para criticar las políticas migratorias alemanas y señalar fallos en la seguridad. Viktor Orban, primer ministro de Hungría y conocido por su postura antimigratoria, calificó el ataque de «acto terrorista» y lo vinculó a las políticas de la Unión Europea.
En su conferencia de prensa anual en Budapest, Orbán afirmó: «No hay duda de que existe un vínculo entre el cambio en Europa Occidental, la migración que fluye allí, especialmente la irregular, y los actos terroristas». También prometió oponerse a las políticas de Bruselas, llegando a sugerir sin pruebas que “Bruselas quiere que lo de Magdeburgo también le suceda a Hungría”.
Esta vez, un partido de ultraderecha, Die Heimat (La Patria), intentó capitalizar el ataque en Magdeburgo organizando una manifestación en la ciudad. Durante la protesta, exhibieron pancartas con la palabra «Remigración», un término que en círculos extremistas se ha convertido en un eufemismo para promover deportaciones masivas.
“Que el odio no determine nuestra convivencia y que no dejemos que quienes quieren sembrar el odio se salgan con la suya, pero también que actuemos contra los autores con todo el rigor de la ley”, apuntó el canciller alemán Olaf Scholz, que llegó este sábado a Magdeburgo.
France 24