¿Cómo nace y se desarrolla el Coro Nacional de Niños Dominicanos?
Este coro tiene capacidad profesional de montar obras clásicas, con apego fiel a la armonía, sustentado en la melodía y con medida afinación
José Rafael Sosa
Santo Domingo, 12 Dic – Una verdad ya dicha: la única forma humana posible de oír a los ángeles en la tierra, es escuchando coros.
Pero a este corolario, ahora se suma uno nuevo: cuando se escuchan coros de niños, es el paraíso el que desciende a la tierra para hacernos vivir sus jornadas luminosas e inexplicables, sus linderos cargados de luz y sonidos inspiradores.
Cuando un coro (adulto o infantil) canta, muere el ego: todas las voces son una, igual de importantes, cada una juega su papel suplementado por las otras voces. Ese rol que valida el ego colectivo, el cuidado de todos para los demás, es una de más hermosas características de un coro, que es un colectivo que solo es valido si sus componentes se armonizan. Es algo un tanto distinto al ego individual e inaguantable por los extremos a que llegan las estelaridades individuales,
Esa, y no otra, es la experiencia que se ha vivido tras escuchar el Coro Nacional de Niños de la República Dominicana, en la Sala Carlos Piantini, del Teatro Nacional Eduardo Brito la noche de este 9 de diciembre.
En el espectáculo coral destacan la calidad, afinación y valor de sus integrantes, evidenciando las razones por la cuales es el primer coro nacional de niños de la República Dominicana.
Era música coral de voces infantiles que llegan a este escenario tras meses, anos, de ensayos, de instrucciones, de entregarse a una pasión: comunicación estética mediante un instrumento musical único: la voz.
El programa, titulado Canta Navidad. Un jolgorio en el teatro, dividido en dos partes, una popular con villancicos dominicanos, latinoamericanos y europeos, con énfasis en los españoles, evidenció los resultados de un entrenamiento de meses a cargo del maestro Ángel Herdz, el director.
Su primer concierto fue en este mismo Teatro Nacional, titulado Laudemusy se ofreció el 27 de mayo de 2022.
Para llegar a este concierto en Teatro Nacional, se ha recorrido un trayecto afanoso, dificil y extendido: el CNND se funda, con apoyo del Ministerio de Cultura, el 21 de abril del 2019, pero desde antes inicio el proceso con la creación del Programa Coral (la escuela de formación) el 7 de junio del 2016, hace ya siete años.
En la primera parte se introdujo el plantel del Coro Preparatorio del Programa Coral Canta y Toca, con cuatro interpretaciones (Catacumba, A Belén, pastorcitos, Una pandereta suena, Esa luz y Viene la Navidad), que arrojó a la plantea una idea del futuro del panorama coral en su plano más originario, nervios incluidos.
Actuaban ante un público, integrado fundamentalmente por sus familias, no impidió percibir que se tenía delante el futuro originario del canto coral infantil dominicano.
Los aplausos se producen tanto por el comprometido respaldo familiar como por el gusto del talento disfrutado por el resto del público. Hay gritos a voz en cuello en aprobación a los noveles cantores.
Para apoyar la labor del CNND, actuaron el maestro pianista Irving Paniagua, el percusionista Johansy Rodríguez y la brillante y afinada Camerata Caribe integrada por jóvenes. Intermedio
Ingresa entonces a escenario el Coro Nacional de Niños Dominicanos para una segunda parte dentro de esa primera entrega, dejando ahora sentir que se trataba de una masa de voces de mucha mayor preparación, exigencia desde la dirección y entrenamiento especializado, especialmente por el desempeño, tanto por la interpretación de las masas corales aderezada de rítmica gracia y sobre una melódica plataforma de las piezas seleccionadas.
Hicieron Campanitas de Cristal, Blanca Navidad (White Christmas), un popurrí de villancicos, Merry Christmas, Darling, Azucenas y miel, Tutaima, divertida tradicional brasileira, en la cual se luce la voz de la soprano Lía Colón, con tonos brillantes y sostenidos elegantes. Fue la solista de esta parte que se escuchó con mayor claridad y tonalidades sutiles.
Tras un intermedio de 15 minutos, inicia la segunda parte, basada en piezas clásicas, desde el extracto Exultante jubilate Alleluia (Wolfang Amadeus Mozar); Carols of the belles y Hacia Belén en burra (del español Antonio Soler).
La composición Jesús, del maestro Ángel Herdz impresionó por su texto, arreglo, la armonía y ejecución. Fue un dulce momento de comunicacion entre público y artistas.
El momento en que se unen el folklore nacional con la navidad se expresó armónicamente con la tonada tradicional A las arandelas, el villancico en ritmo merengue más conocido. Resaltó la gracia tanto vocal como la coordinación de movimientos escénicos de grupos del coro.
¿Cuáles son los talentos?
Justo es reconocer quienes son los protagonistas de esta institución coral que sienta un precedente: Aida Hernández, Alany Buesa, Alondra Tejeda, Amanda Perdomo, Amanda Ureña, Amelia Amancio, Anabel Mora, Ángel Tobías De los Santos, Angelina Azpurua, Benisha Ramírez, Camila Maldonado, Carmen Eli De Aza, Daniela Vargas, Dianny Peralta, Edith Crispín, Eskeisy González, Gerlín Jiménez, Greisy Suárez y Hengler García.
Son parte del CNND: Herlin Mendoza, Joaquín Taveras, Karel Tineo, Karen Alcántara, Kehiry Valdez, Keidel Montero, Keisha González, Lia Rachelle Colón, Loribel Rodríguez, Luis King, María Fernanda, Mia Samantha Martínez, Noelia De León, Paula Celiné Montero, Rosa Buopensiere, Rosibel Ovalles, Shantal Aquino, Vera Sofia Borsos y Victoria Amancio, expuestos en estricto orden alfabético.
¿Es este el primer coro de niños?
El país tiene y ha tenido muchos coros de niños, coros de diferentes denominaciones: religiosas, sociales, empresariales y culturales.
La diferencia de este Coro Nacional de Niños Dominicanos es que, además de ser igual a otros anteriores en cuanto a la edad de sus integrantes, este es el primero en capacidad y con talentos para interpretar obras de los grandes maestros de la historia de la música. Es este el primer coro nacional infantil con condiciones profesionales y orientado a aprender música, aprender a leerla y a cantarla, con todo el profesionalismo técnico vocal requerido.
Origen de coros infantiles
El origen de los coros infantiles es religioso cristiano y se registra en torno al siglo XII cuando se reportan los primeros operandos en torno a iglesias cristianas.
Estos grupos infantiles nacen en por la necesidad de los templos cristianos de, ante las liturgias y actos propios de las ceremonias, de contar con voces tiernas y agudas ante la prohibición de que las mujeres cantaran en iglesias
Normalmente, indican los profesores de canto, los coros de niños pueden estar constituidos por voces de soprano y contralto (como es el caso del coro más conocido en el mundo Los Niños Cantores de Viena, fundados el 7 de julio de 1498, cuando el emperador Maximiliano I de Austria, padre de Felipe el Hermoso, funda la Capilla Musical de la Corte con el fin de servir a los oficios religiosos del Palacio Real de Hofburg. Su primer director fue el Obispo Georg Slatkonia (1456-1522), apunta la enciclopedia en línea Wikipedia: https://es.wikipedia.org/wiki/Coro_de_ni%C3%B1os)