Continúa la controversia por cobro de renovación de licencias a mayores de 65 años
Santo Domingo, 9 de noviembre – El Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant) sigue aplicando una tarifa controvertida de RD$1,900 por la renovación bianual de la licencia de conducir a personas mayores de 65 años, una medida que ha sido cuestionada por considerarse contraria a la Constitución y a la normativa vigente.
Reporteros constataron que, a pesar de las promesas del director del Intrant, Milton Morrison, de revisar la situación en la reunión de la pasada semana, los cambios no se han implementado. Esta política ha causado indignación entre personas de 65 años y más, quienes manifiestan su rechazo al ser obligados a pagar esta tarifa. Durante una visita a las instalaciones del Intrant, algunos usuarios alzaron su voz en protesta, exigiendo que el organismo respete las leyes dominicanas.
La normativa, que se basa en el decreto 6-19 y en tarifas aprobadas por el Consejo de Dirección del Intrant en mayo de 2020, establece que todos los conductores deben pagar la misma tarifa de renovación, sin considerar la edad.
En respuesta a la controversia, el Intrant emitió un comunicado explicando que el monto de RD$1,900 no representa un cobro adicional para los mayores de 65 años, sino que responde a las tarifas generales de renovación. Sin embargo, muchos argumentan que esta política contradice el principio de equidad y viola los artículos 38 y 39 de la Constitución, que garantizan igualdad y dignidad a todos los ciudadanos.
El presidente Luis Abinader abordó la polémica durante su intervención en «La Semanal», donde anunció que esta disposición sería eliminada, permitiendo que los mayores de 65 años renueven sus licencias por períodos superiores a dos años, en las categorías 01, 02 y 03. En respuesta a una pregunta sobre si él mismo tendría que pagar la tarifa en el futuro, Abinader afirmó: “Yo no lo voy a pagar, porque eso se va a eliminar en las próximas semanas”.
A pesar de esta promesa presidencial, la medida sigue vigente y el Intrant no ha implementado ningún cambio en sus políticas. Esta situación se suma a antecedentes de incumplimientos legales por parte de la entidad, como el límite de edad de 65 años impuesto anteriormente a los conductores de transporte público, el cual fue anulado por la sentencia TC/0005/20 del Tribunal Constitucional.
La situación actual genera descontento entre los ciudadanos mayores que, además de cumplir con los requisitos para renovar sus licencias, deben enfrentar tarifas que consideran desproporcionadas y excluyentes.
