Crisis en Haití y migración dominan el encuentro entre Antony Blinken y Luis Abinader

Santo Domingo, 7 de septiembre – En una reunión a puerta cerrada, el secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, y el presidente dominicano, Luis Abinader, abordaron varios temas de importancia bilateral, incluyendo derechos humanos, prosperidad económica y seguridad regional.

Sin embargo, fue la crisis en Haití la que dominó la conversación, dada la situación de violencia que afecta al país vecino y sus repercusiones en la República Dominicana.

Blinken, quien llegó a la República Dominicana tras su visita a Haití, subrayó el apoyo de Estados Unidos a la misión liderada por Kenia, respaldada por la ONU, para combatir a las pandillas que controlan gran parte del territorio haitiano.

Durante su estancia en Haití, el secretario de Estado también anunció un aumento de 45 millones de dólares en ayuda humanitaria y destacó los avances en la estabilización del gobierno de transición haitiano.

La Inquietud de la República Dominicana ante la crisis haitiana

Durante la rueda de prensa conjunta en el Palacio Nacional, Abinader expresó sus profundas preocupaciones sobre la situación en Haití y cómo esta crisis afecta directamente a la República Dominicana.

El presidente dominicano destacó que la violencia y la falta de control en Haití han provocado un aumento en la migración ilegal hacia el país, desbordando los servicios de salud y educación.

Abinader mencionó que el 14 % de los internamientos en los hospitales públicos y el 34 % de los partos corresponden a inmigrantes indocumentados haitianos. Además, señaló que el 6.5 % de la matrícula escolar dominicana está compuesta por estudiantes de nacionalidad haitiana, unos 147,000 en total. Esta presión migratoria, sumada a la crisis económica y de seguridad en Haití, representa un gran desafío para la República Dominicana.

«Haití está en una situación muy delicada», afirmó Abinader, añadiendo que su gobierno está dispuesto a colaborar para mejorar la situación, pero que la seguridad de los ciudadanos dominicanos siempre será la prioridad. «Nuestra intención es normalizar las relaciones en la medida de lo posible, pero siempre respetando y cuidando la seguridad de la República Dominicana», puntualizó.

La Respuesta de Estados Unidos y la misión internacional en Haití

Por su parte, Antony Blinken reconoció la gravedad de la crisis en Haití y cómo esta afecta no solo a la República Dominicana, sino a toda la región del hemisferio occidental. Según el secretario de Estado, la situación en Haití es un reto «complejo» que requiere una intervención prolongada y bien estructurada.

Blinken reafirmó el compromiso de Estados Unidos para trabajar con la comunidad internacional y brindar apoyo a la misión liderada por Kenia, que busca restaurar el orden en Haití y combatir a las poderosas bandas armadas.

La misión de Kenia, que cuenta con el respaldo de la ONU, ha comenzado a desplegar tropas para apoyar a la Policía Nacional de Haití en su lucha contra las pandillas, que controlan amplias áreas del país, incluyendo la capital, Puerto Príncipe.

Blinken subrayó que Estados Unidos llevará el tema haitiano nuevamente ante el Consejo de Seguridad de la ONU en octubre, para asegurar la continuidad de la misión y coordinar el apoyo financiero y logístico necesario.

«Nuestro futuro y nuestros destinos están unidos», afirmó Blinken, refiriéndose a la estrecha relación entre Haití y la República Dominicana en la isla de La Española. También destacó los esfuerzos para incrementar la ayuda internacional y las contribuciones a la misión de seguridad en Haití.

La Crisis en Venezuela y su impacto en las relaciones bilaterales

Además de la situación en Haití, otro tema que fue parte de la conversación entre Blinken y Abinader fue la crisis en Venezuela, tras las controvertidas elecciones del pasado 28 de julio, en las que Nicolás Maduro fue declarado ganador.

La República Dominicana, junto con otros países de la región, ha expresado su preocupación por la legitimidad de esos comicios y ha pedido una revisión de los resultados.

El presidente Abinader, en respuesta a las recientes amenazas del ministro de Justicia venezolano, Diosdado Cabello, reafirmó que la República Dominicana sigue comprometida con la defensa de los valores democráticos.

Cabello había advertido sobre posibles represalias contra el país caribeño tras la incautación en territorio dominicano de un avión propiedad de Nicolás Maduro, que posteriormente fue confiscado por las autoridades estadounidenses.

Abinader fue enfático al afirmar que, a pesar de no contar con recursos como el petróleo, la República Dominicana ha logrado consolidarse como una de las principales economías de América Latina, destacándose en la región. «Sin tener petróleo, sin tener hidrocarburos, pero con una administración que funciona, somos ahora la séptima economía de América Latina», subrayó el mandatario.

Blinken, por su parte, reiteró la preocupación de Estados Unidos por la situación en Venezuela y las consecuencias de las elecciones presidenciales. «La voluntad del pueblo venezolano no pudo haber sido más clara, pero lamentablemente esa voluntad no se ha reflejado en lo que ha sucedido desde entonces», dijo el secretario de Estado.

También insistió en que es crucial que Venezuela retome el camino hacia la democracia y que Estados Unidos continuará trabajando con países de la región, como la República Dominicana, Brasil, Colombia y México, para encontrar una solución a la crisis política en Venezuela.

El Futuro de las relaciones dominico-estadounidenses

Al finalizar el encuentro, tanto Blinken como Abinader manifestaron su optimismo sobre el futuro de las relaciones entre la República Dominicana y Estados Unidos. Blinken destacó la importancia de la colaboración en temas de seguridad, prosperidad económica y derechos humanos, y subrayó el papel clave que juega la República Dominicana en la región.

La visita de Blinken a Santo Domingo también se enmarca dentro de los esfuerzos más amplios de la administración estadounidense por reforzar sus lazos con los países del Caribe y América Latina, especialmente en áreas relacionadas con la seguridad y la migración.

Ambos líderes acordaron continuar trabajando de manera conjunta en estos temas, con la esperanza de encontrar soluciones sostenibles a las crisis que afectan tanto a Haití como a Venezuela.

Comentarios
Difundelo
Permitir Notificaciones OK No gracias