Crisis por fiebre porcina africana en el cibao: Productores denuncian falta de compensación adecuada

Moca, 24 de marzo. – La fiebre porcina africana (PPA) sigue generando preocupación entre los productores de cerdo en la región del Cibao, quienes acusan al Gobierno de no compensar adecuadamente las pérdidas económicas derivadas del sacrificio de sus animales.

Denuncian que la falta de un plan de compensación justo ha contribuido a la propagación de la enfermedad en varias localidades.

Ambiorix Cabrera, presidente de la Asociación de Pequeños Productores Avícola Moca-Licey (Approamoli), criticó el manejo del Gobierno en la erradicación de la peste porcina, calificándolo de deficiente. Según Cabrera, la enfermedad se ha extendido debido a la ineficiencia de las autoridades en la contención de la crisis.

Tony Inoa, productor porcino en Moca, lamentó que los productores sean los más afectados y que el Estado solo quiera pagar la compensación por un número limitado de cerdos, a pesar de que muchos tienen granjas con más de 100 cabezas de ganado porcino.

«Solo quieren pagar 50 cerdos, pero la mayoría de los productores tienen más de 100. A un señor le sacrificaron alrededor de 500 cerdos y ni siquiera sabe si le van a pagar por ellos», expresó Inoa, visiblemente indignado.

Hipólito Mejía responsabiliza a los productores

La polémica se intensificó con las declaraciones del expresidente de la República, Hipólito Mejía, quien durante su visita a la Feria Agropecuaria Nacional en la Feria Ganadera del Distrito Nacional, culpó a los productores por la propagación de la enfermedad.

Mejía sostuvo que la fiebre porcina africana es un problema de larga data y consideró que su expansión se debe a la irresponsabilidad de los productores, quienes, según él, se niegan a sacrificar los animales afectados.

«Cuando el Gobierno no hace su trabajo, trata de echarle la culpa a los productores», respondió Tony Inoa a las declaraciones del exmandatario. También explicó que la enfermedad nunca ha desaparecido completamente del país y que, cuando se detecta, los síntomas son evidentes: «Las puercas madres empiezan a morir, los cerdos tiemblan y, finalmente, fallecen.»

Actualmente, se han reportado dos brotes confirmados en la zona de Guanábano y en Cayetano Germosén, además de algunos casos en Barranca, La Vega.

Sacrificio masivo de cerdos por disposición oficial

Como parte de las medidas de control, las autoridades sanitarias sacrificaron al menos 400 cerdos en el municipio de Cayetano Germosén, provincia Espaillat, el pasado 20 de marzo. El operativo se llevó a cabo siguiendo los protocolos establecidos para evitar una mayor propagación del virus.

Sin embargo, los productores insisten en que estas medidas son insuficientes si no se acompañan de una compensación justa. Advierten que, ante la falta de pago por la totalidad de sus pérdidas, algunos optan por vender sus animales en mercados informales antes de reportar la presencia del virus, lo que contribuye a la diseminación de la enfermedad.

El mercado de la carne de cerdo se mantiene estable

A pesar de la alerta sanitaria y del sacrificio de cientos de cerdos en diversas localidades, la demanda de carne de cerdo en los mercados del Gran Santo Domingo se mantiene estable.

Un recorrido por el Mercado Nuevo de La Duarte, Villa Consuelo y la Ciudad Ganadera reveló que los consumidores continúan comprando chuletas, piernas, costillitas y longaniza con normalidad.

Plutarco de la Rosa, carnicero en el Mercado Nuevo de La Duarte, afirmó que no ha percibido una baja en las ventas ni una variación en los precios. «Hasta ahora, la gente sigue comprando cerdo con normalidad», comentó mientras despachaba una pierna de cerdo a un cliente.

Franklin Vélez, otro vendedor de carne de cerdo que también cría sus propios animales, aseguró que la alerta sanitaria no ha impactado su negocio. Destacó que mantiene estrictas medidas de bioseguridad en su granja para evitar la propagación del virus.

«Hoy ha sido uno de los días que más he vendido», afirmó Vélez con optimismo, señalando a los compradores que esperaban su turno en su carnicería.

En Villa Consuelo, la situación es similar. Juan (nombre ficticio), un vendedor que prefirió mantenerse en el anonimato, sugirió que la alarma generada por la fiebre porcina podría tener motivaciones políticas. «Todo esto es parte de una campaña de los partidos políticos. La gente no va a dejar de comer cerdo por eso», comentó.

Mientras tanto, en la Ciudad Ganadera, el flujo de compradores era aún mayor que en los mercados de La Duarte y Villa Consuelo. Muchos adquirían bandejas preparadas con longaniza, chuleta, chicharrón y pierna de cerdo, sin mostrar preocupación por la enfermedad que afecta a los cerdos en otras partes del país.

Precios de la carne de cerdo sin variaciones

Los vendedores coinciden en que los precios se han mantenido estables, con la carne de cerdo oscilando entre RD$120 y RD$125 por libra, mientras que la chuleta fresca se mantiene en RD$105 por libra.

A pesar de la crisis sanitaria que afecta a los porcicultores, la estabilidad en la venta y los precios de la carne reflejan que, hasta el momento, los consumidores no han reaccionado con alarma ante el rebrote de la fiebre porcina africana.