Dominicana Soledad Álvarez, Premio Casa de América de Poesía Americana
Madrid, 4 oct (EFE).- La dominicana Soledad Álvarez fue galardonada con el XXII Premio Casa de América de Poesía Americana, por su obra «Después de tanto arder», trabajo de «poderosa indagación, entre irónica y melancólica, del paso de tiempo».
Así la valoró el jurado de este galardón, cuyo fallo se conoció hoy, y que califica el libro también de ser un texto «capaz de usar la intimidad como un espacio propio desde el que observar nuestro mundo asolado por guerras y pandemias y de reflexionar sobre el feminismo, la familia o las servidumbres de la pareja».
El premio, convocado por Casa de América con la aspiración de estimular la escritura poética en el ámbito americano, incluye, además de una dotación económica de 5.000 euros, la publicación de la obra.
Soledad Álvarez (Santo Domingo, 1950) es poeta y ensayista, graduada en Filología por la Universidad de La Habana.
Durante su estadía en Cuba trabajó en el Centro de Investigaciones Literarias (CIL) de Casa de las Américas y a su regreso a Santo Domingo fue subdirectora del suplemento cultural «Isla Abierta», del periódico Hoy.
Premio Nacional de Literatura 2022 en su país, Álvarez fue galardonada también con el Premio Siboney de Ensayo con el libro «La magna patria de Pedro Henríquez Ureña».
Como poeta ha publicado los libros «Vuelo Posible» (1994), «Las estaciones íntimas», Premio Nacional de Poesía 2006 y «Autobiografía en el agua», Premio Nacional de Poesía 2016.
También es autora de ensayos y como antóloga ha publicado los libros «La ciudad en nosotros» (2008) y «Santo Domingo. Visiones de la ciudad» (2010).
En esta edición del Premio Casa de América de Poesía se recibieron 573 manuscritos de 24 países diferentes: el 22 % de ellos de Argentina, el 15 % de Colombia y el 9 % de México; seguidos de Perú, Chile, Cuba y España, que representan cada uno un volumen del 6 %.
En este sentido, según destacó la Casa de América, la cantidad de los trabajos presentados hace que «convivan poemarios de una alta escritura con otros de cierto tono adolescente y epigonal».
«Se manifiesta también una poesía que año tras año indaga en el lenguaje de este nuevo siglo. Asimismo, por segundo año consecutivo toma una importante fuerza lo femenino, de la posición de la mujer en el mundo de los afectos y de nuestra historia», según Casa de América. EFE