Dos píldoras para el tratamiento del COVID
Vida y Salud
Dos píldora nuevas, cuando se toman al inicio de la enfermedad, podrían reducir el riesgo de requerir hospitalización y de morir en las personas infectadas por el COVID-19. Son los primeros medicamentos orales que podrían ayudarnos y que se unen a las herramientas para combatir esta pandemia. No reemplazan a las vacunas, sino que son unas armas adicionales. Aquí te explico más acerca de estos medicamentos.
A diferencia de otros tratamientos efectivos contra el COVID-19, como el Remdesivir y los anticuerpos monoclonales, que se dan por vía intravenosa (en la vena), el Molnupiravir (del laboratorio Merck) que recién se aprobó en el Reino Unido y una medicina que se conoce como PF-07321332 o simplemente ‘332 del laboratorio Pfizer, son las primeras medicinas orales efectivas contra esta infección cuando se dan en los primeros días.
Molnupiravir (su nombre comercial será Lagevrio):
De acuerdo con el estudio, los que tomaron cuatro pastillas dos veces al día por cinco días durante los cinco días del inicio de los síntomas tuvieron aproximadamente la mitad de probabilidad de ser hospitalizados que los que tomaron un placebo. También redujeron su riesgo de muerte en el mes después de tomar Molnupiravir. Además, aunque todavía es cara (se estima que será de $700 dólares por la terapia de cinco días por persona), el costo del tratamiento intravenoso es tres veces más elevado que el tratamiento oral.
En un estudio clínico en fase 3 que se realizó para llegar a las conclusiones, los investigadores le dieron el Molnupiravir o placebo a 775 personas no vacunadas. Todos los participantes habían tenido pruebas positivas al virus SARS-CoV-2 y habían tenido síntomas ligeros a moderados de COVID-19 que se habían iniciado no más de cinco días antes. Cada participante tenía al menos un factor de riesgo para desarrollar Covid-19 severo (como obesidad, diabetes, enfermedad del corazón o era mayor de 60 años) pero no había requerido hospitalización.
Se asignó al azar a cada participante a uno de dos grupos: al de Molnupiravir o al de placebo. Ambos tomaron una cápsula dos veces al día por cinco días.
De los 385 pacientes que tomaron Molnupiravir, 28 requirieron hospitalización, comparado con 53 en el grupo que tomó placebo (una reducción del 50%). Por otro lado, 8 de los del grupo que tomó placebo fallecieron, mientras que ninguno de los que tomaron el antiviral fallecieron al final de los 29 días del periodo del estudio.
El estudio se suspendió debido a los resultados positivos que se obtuvieron. Las compañías Merck y Ridgeback Biotherapeutics los encontraron tan convincentes que decidieron solicitar autorización de emergencia de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).
Una vez que se autorice, el presidente Biden ha solicitado un suministro de 1,7 millones de tratamientos de Molnupiravir para su distribución en los Estados Unidos. Otros países también han hecho pedidos, y la Bill & Melinda Gates Foundation ha comprometido hasta $120 millones de dólares para que los países pobres también tengan acceso a esta medicina una vez que se apruebe.
Merck ha estado produciendo el Molnupiravir anticipando la autorización de la FDA. La compañía espera producir 10 millones de tratamientos de cinco días para fines de este año, y muchos más para el 2022.
¿Qué es el Molnupiravir y cómo funciona?
Es una pastilla antiviral fabricada por la compañía Merck que se usa contra varios virus, incluyendo los del herpes y la influenza (flu o gripe). Los virus necesitan reproducirse dentro de las células para enfermarlas. Los antivirales detienen ese proceso para evitar que la enfermedad progrese. La forma como lo hace específicamente en este caso es introduciendo bloques de construcción parecidos al ARN en el genoma del virus a medida que se reproduce (se multiplica). Esto crea varias mutaciones (cambios) que interrumpen la reproducción y matan al virus. Por eso esta clase de antivirales se llaman ribonucleósidos mutagénicos. Algunos investigadores están siguiendo de cerca a este antiviral porque piensan que en teoría podría causar malformaciones congénitas o aumentar el riesgo de cáncer. Pero esto sólo es una teoría ya que no se ha visto en los estudios en animales.
El evitar que el virus se multiplique es importante porque entre más células destruye, más se enferma la persona. Y cuando la cantidad de virus es significativa, el sistema inmunitario o inmunológico podría sobre-reaccionar causando otros problemas en el cuerpo.
PF-07321332 o ‘332 (su nombre comercial será Paxlovid)
El 5 de noviembre, la compañía Pfizer anunció la eficacia de sus estudios clínicos en 3,000 participantes adultos a los que se les había dado de forma aleatoria su medicamento junto con Ritonavir o un placebo cada 12 horas durante cinco días (30 pastillas en total) después de que se había confirmado el diagnóstico de Covid-19. El tratamiento debía iniciarse dentro de los cinco días del inicio de los síntomas. Y los pacientes en este estudio debían tener mínimo una condición asociada con mayor riesgo para desarrollar Covid-19 severo (como ser mayores de 65 años, ser obesos, tener diabetes, etc.).
El Ritonavir es una pastilla que se conoce desde hace mucho tiempo (se ha usado para el VIH) y se da junto con el Paxlovid porque le permite permanecer activo en el cuerpo por más tiempo.
La eficacia con el tratamiento oral de Pfizer fue del 89% de reducir el riesgo de hospitalización o muerte en los que lo iniciaron a los tres días de iniciar los síntomas y de 85% en los que lo iniciaron al cuarto o quinto día de iniciar los síntomas. Los estudios se interrumpieron debido a su efectividad. Sugieren que podrían no sólo evitar 9 de cada 10 hospitalizaciones, sino salvar vidas.
Hasta ahora los resultados son en pacientes de alto riesgo, pero Pfizer está realizando estudios en pacientes de bajo riesgo y en personas que viven en la misma casa de los que se han infectado. Los efectos secundarios del tratamiento reportados fueron muy ligeros.
¿Qué es el ‘332 o Paxlovid y cómo funciona?
El ‘332 o Paxlovid es un medicamento que pertenece a los inhibidores de las proteasas, que generalmente se utilizan para el tratamiento de la hepatitis C o del VIH. Funcionan evitado que el coronavirus se multiplique bloqueando la actividad de una enzima (llamada proteasa) clave que el virus del Covid-19 utiliza para multiplicarse dentro de las células. No utiliza al ADN por lo que no hay riesgo de mutaciones.
El Ritonavir también pertenece a los inhibidores de las proteasas y se da junto con el Paxlovid para que permanezca activo en el cuerpo más tiempo.
¿Cómo se compara la eficacia de estos tratamientos?
Como mencioné anteriormente, la eficacia con el tratamiento oral de Pfizer fue del 89% de reducir el riesgo de hospitalización o muerte en los que lo iniciaron a los tres días de iniciar los síntomas y de 85% en los que lo iniciaron al cuarto o quinto día de iniciar los síntomas.
Comparativamente, la eficacia del tratamiento de Merck fue del 50% cuando se daba al quinto día del inicio de los síntomas. Aunque el diseño de los estudios de Pfizer y de Merck hace que la comparación no sea muy precisa.
Vale la pena mencionar que los tratamientos con los anticuerpos monoclonales (que son intravenosos) reducen las hospitalizaciones y las muertes por al menos un 70% en los pacientes con COVID de alto riesgo, pero la administración de esos tratamientos es más costosa y más inconveniente.
Existen algunos retos con ambas pastillas una vez que se aprueben en los EEUU.
¿Serán accesibles para todos, debido a su costo? Los Estados Unidos y otros países han firmado acuerdos para cuando estén disponibles los tratamientos orales. Es menor al costo del tratamiento con remdesivir o los anticuerpos monoclonales pero, ¿cuál será el costo para los países en África y otros países pobres?
Merck ha dicho que permitirá el acceso internacional a su pastilla después de firmar un acuerdo con una organización de salud pública respaldada por las Naciones Unidas dedicada a llevar medicamentos a países de bajos ingresos. De esta forma ayudará a que 105 países de bajos y medianos ingresos tengan acceso a su pastilla.
Aún si los países pobres tuvieran acceso a estos tratamientos, es necesario tener la habilidad de diagnosticar rápidamente ya que la terapia se debe de dar en los primeros cinco días de que se desarrollan los síntomas. ¿Tendrán la capacidad los países pobres de diagnosticar a las personas rápidamente?
Stephen Griffin Ph.D., profesor adjunto de medicina de la University of Leeds dijo que “El éxito de estos antivirales potencialmente marca una nueva era en nuestra capacidad para prevenir las graves consecuencias de la infección por SARS-CoV2, y también es un elemento vital para la atención de las personas clínicamente vulnerables que podrían no ser candidatos para recibir o responder a las vacunas”.
Los expertos dicen que, aunque ambos tratamientos orales parecen prometedores, no son una alternativa a la vacuna que todavía ofrece la mejor protección. La vacuna previene la infección. Eso siempre es lo mejor. Prevenir es mejor que remediar. Pero como dicen algunos expertos, para combatir una enfermedad infecciosa se necesita más de un juego de herramientas. Se necesita un arsenal completo de tecnologías.