EE.UU. da un carpetazo al envío de aviones polacos a Ucrania por el riesgo de una escalada
Washington, 9 mar (EFE).- Estados Unidos zanjó este miércoles la polémica por la propuesta de Polonia de transferirle aviones de combate para mandarlos a Ucrania al considerar que podría provocar una reacción de Rusia que llevaría a una escalada militar con la OTAN.
Así lo transmitió el secretario de Defensa de EE.UU., Lloyd Austin, a su homólogo polaco, Mariusz Blaszczak, durante la llamada telefónica que sostuvieron durante esta jornada.
Austin dio las gracias a Polonia por su disposición a seguir buscando formas de ayuda a Ucrania, «pero no apoyamos en este momento la transferencia de más aviones de combate a la Fuerza Aérea ucraniana, y por tanto no tenemos ningún deseo de verlos bajo nuestra custodia», remarcó el portavoz del Pentágono, John Kirby.
El martes, el ministro polaco de Exteriores, Zbigniew Rau, anunció que Polonia estaba «preparada» para entregar «de forma inmediata y gratuita» sus aviones MiG-29, de fabricación rusa, a las fuerzas estadounidenses radicadas en la base aérea de Ramstein (Alemania), a cambio de un número equivalente de aviones F-16 usados, de fabricación estadounidense.
Al conocer esta oferta, que calificó de «movimiento sorpresa», Kirby declaró ayer en un comunicado que aceptar tal propuesta planteaba «serias inquietudes para toda la Alianza» Atlántica y concluyó que la operación no es «sostenible».
Con base en los informes de inteligencia de que dispone, EE.UU. considera que la transferencia de los MiG-29 podría ser tomada por Rusia como un paso «escalatorio» y resultar en «una reacción rusa significativa que podría aumentar las perspectivas de una escalada militar con la OTAN», apuntó Kirby este miércoles en una rueda de prensa.
Por tanto, «evaluamos la transferencia de los MiG-29 a Ucrania como de gran riesgo», sentenció.
Otro de los motivos esgrimidos por Kirby es la creencia de EE.UU. de que la mejor manera de asistir a Ucrania es proporcionarle las armas y los sistemas que necesita para derrotar a Rusia, en concreto, defensas antiblindados y antiaéreas.
«Junto a otras naciones seguimos enviándoles estas armas y sabemos que están siendo usadas con gran efecto: han ralentizado el avance ruso por el norte y la disputa por el espacio aéreo de Ucrania es prueba de ello», indicó Kirby.
El portavoz destacó que, pese a que las capacidades aéreas de Rusia son importantes, su efectividad se ha visto limitada por los sistemas de defensa antiaérea en manos de Ucrania, como los misiles portátiles guiados tierra-aire conocidos como MANPADS, por sus siglas en inglés.
Otra las de razones expuestas por Kirby fue el hecho de que la Fuerza Aérea ucraniana cuente ya con varios escuadrones capaces de llevar a cabo misiones completas.
«Estimamos que sumar aviación al inventario de Ucrania es probable que no suponga ningún cambio significativo en la efectividad de la Fuerza Aérea ucraniana en lo que respecta a las capacidades rusas», remarcó.
Kirby opinó que hay opciones alternativas que pueden ser más útiles a las Fuerzas Armadas ucranianas.
«Estamos trabajando con otros aliados y socios alrededor del mundo que podrían tener capacidades de defensa aérea adicionales y sistemas que podrían estar dispuestos a proporcionar a Ucrania», señaló Kirby.
Concretó que el posible suministro de más misiles tierra-aire que, recordó, los ucranianos están entrenados para usar, forma parte de esas discusiones.
De hecho, en la última reunión de ministros de Exteriores de OTAN descartaron enviar tropas o aviones de la Alianza a Ucrania para evitar que el conflicto se expanda a otros países.
Por otro lado, Kirby habló este miércoles del envío por parte de EE.UU. de dos baterías antiaéreas Patriot a Polonia, solicitado por este país, y aclaró que no ha ocurrido nada que haya precipitado esta decisión.
«Hemos hablado durante semanas de nuestra disposición y nuestra capacidad de mover activos en la escena, dadas las condiciones sobre el terreno, dada la que parecía una invasión inminente y ahora lo está siendo una invasión bastante destructiva en Ucrania», apuntó.
El portavoz aseguró que Austin siempre ha tenido sobre la mesa la posibilidad de relocalizar los activos militares de EE.UU, «y cree que vienen mejor a la defensa de territorio de la OTAN».
Kirby agregó que el envío de las dos baterías antiéreas Patriot a Polonia es temporal, y que serán trasladas desde Alemania.
Estos movimientos coinciden con el inicio de la visita este miércoles a Polonia y a Rumanía de la vicepresidenta estadounidense, Kamala Harris, con la guerra en Ucrania de trasfondo.
Harris comenzará su agenda de actividades en Polonia el jueves, con sendas reuniones con el presidente polaco, Andrzej Duda, y el primer ministro del país, Mateusz Morawiecki.
También mantendrá un encuentro con el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, que al igual que ella estará en la capital polaca.
La vicepresidenta se reunirá asimismo con personal de la embajada estadounidense en Varsovia y con diplomáticos de la misión de EE.UU. en Ucrania, que suspendió sus operaciones en Kiev hace casi un mes y las trasladó a Lviv, en el oeste de ese país.
El viernes, se encontrará con militares estadounidenses y polacos para darles las gracias por su trabajo, y luego se dirigirá a Bucarest, la capital rumana, donde se reunirá con el presidente de Rumanía, Klaus Iohannis, y personal diplomático antes de volver a Washington.