EEUU atacó otro barco de presuntos narcotraficantes cerca de Venezuela; murieron 6, dice Trump
WASHINGTON, 14 octubre. — El presidente Donald Trump dijo el martes que Estados Unidos atacó otra pequeña embarcación que presuntamente transportaba drogas en las aguas frente a Venezuela, matando a seis personas.
Los fallecidos iban bordo de la embarcación, y ningún elemento estadounidense resultó herido, dijo el presidente republicano en una publicación en redes sociales. Es el quinto ataque mortal ejecutado en el Caribe desde que el gobierno de Trump afirmó que considera a los presuntos narcotraficantes como combatientes ilegales que deben ser enfrentados con fuerza militar.
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ordenó el ataque el martes por la mañana, indicó Trump, quien publicó un video del mismo, como lo había hecho en el pasado. Hegseth luego compartió el video en una publicación en X.
Trump añadió que el ataque fue realizado en aguas internacionales y que información de “inteligencia” confirmó que la embarcación traficaba narcóticos, que estaba asociada con “redes narcoterroristas” y que se encontraba en una ruta de narcotráfico conocida.
El Pentágono no respondió de momento a un correo electrónico de The Associated Press solicitando más información.
La frustración con el gobierno de Trump ha ido creciendo en el Capitolio entre miembros de ambos partidos. Algunos republicanos buscan más información de la Casa Blanca sobre la justificación legal y los detalles de los ataques. Por su parte, los demócratas sostienen que tales ofensivas violan las leyes estadounidenses e internacionales.
La semana pasada, el Senado votó una resolución de poderes de guerra que habría impedido que el gobierno de Trump efectuara los ataques a menos que el Congreso los autorizara específicamente, pero no fue aprobada.
En un memorando enviado al Congreso y obtenido por The Associated Press, el gobierno de Trump señaló que había determinado que “Estados Unidos participa en un conflicto armado no internacional con esas organizaciones designadas como terroristas” y que al mandatario había ordenado al Pentágono que “ejecutara operaciones contra ellos en virtud de la ley del conflicto armado”.
El gobierno de Trump no ha proporcionado pruebas subyacentes a los legisladores para demostrar que los barcos, atacados por el Ejército en una serie de ofensivas fatales, realmente transportaban narcóticos, de acuerdo con dos funcionarios estadounidenses familiarizados con el tema y que no estaban autorizados para comentar públicamente, por lo que hablaron bajo condición de anonimato.
Los ataques se produjeron después de una acumulación de fuerzas marítimas estadounidenses en el Caribe, distinta a cualquier otra en tiempos recientes.
La semana pasada, el ministro de defensa de Venezuela, Vladimir Padrino, dijo a líderes militares que el gobierno estadounidense sabe que las acusaciones de tráfico de drogas utilizadas para apoyar las recientes acciones en el caribe son falsas, y que su verdadera intención es “forzar un cambio de régimen” en el país sudamericano.
Añadió que el gobierno venezolano no considera el despliegue de los buques de guerra estadounidenses como una mera acción propagandística y advirtió de una posible escalada.
Dijo a la población que tiene que prepararse, “porque la irracionalidad con que actúa el imperialismo norteamericano no es normal, es antipolítica, es antihumana, es guerrerista, es grosera, es vulgar”. AP