El ministro de Interior se desmarca del escándalo del hijo mayor de Petro (VIDEO)
Bogotá, 6 mar (EFE).- El ministro del Interior de Colombia, Alfonso Prada, se desmarcó este lunes de los supuestos delitos de corrupción en los que está involucrado Nicolás Petro Burgos, hijo mayor del presidente Gustavo Petro y protagonista de un escándalo que salpica al Gobierno nacional.
Prada aseguró en una rueda de prensa que cada funcionario debe aclarar sus actuaciones en este escándalo, el más grave desde que Petro asumió la presidencia, hace siete meses.
El jefe de la cartera de Interior y portavoz del Gobierno se refirió a los «chats» entre Nicolás Petro y su exesposa, Day Vásquez, divulgados por la prensa, en los cuales se lee que Prada le dio «10 cupos» en su ministerio al hijo del presidente para que supuestamente recomendara a 10 abogados para cargos en el Gobierno.
«Fundamentalmente el año pasado tuve dos reuniones con él (Nicolás Petro Burgos), jamás me ha entregado una hoja de vida para que le nombre una persona, jamás hemos hablado de cupos de nada porque en mi lenguaje no existe la palabra cupos en el Ministerio», dijo Prada.
El funcionario, clave en las relaciones del Gobierno con el Congreso en donde se discuten las reformas a la salud, y en los próximos días la de pensiones y laboral, también aseguró: «Yo no entrego cupos».
«Es una palabra (cupos) completamente extraña a una conversación y habría que ver en el marco de esa conversación privada a qué se referían y qué exactamente quiso decir; no sé si cuando dice ‘Prada me dio 10 cupos’ se refiera a qué», aseguró el ministro.
CONTACTOS CON EL GOBIERNO
Prada explicó que conoció a Nicolás Petro Burgos en la campaña presidencial de 2022 en la cual el hijo del hoy mandatario trabajó como «uno de los coordinadores en el departamento del Atlántico», en el norte del país.
«Él (Petro Burgos) trabajó allá, me acompañó a distintas reuniones, lo conocí desplegando su actividad política. Hasta hoy mi relación ha sido en ese nivel», afirmó Prada.
En los mensajes de WhatsApp publicados en los últimos días, el hijo del presidente y su exesposa hablan de supuestas reuniones que habría tenido este último con altos miembros del Gobierno.
Además de Prada, menciona a la ministra de Salud, Carolina Corcho; al ahora exministro de Educación Alejandro Gaviria; a la directora del Departamento de Prosperidad Social, Cielo Rusinque, y al director del Departamento Administrativo de la Presidencia, Mauricio Lizcano.
EL CENTRO DE LA TORMENTA
Nicolás Petro está en el centro de la tormenta por cuenta de las revelaciones que su exesposa hizo en una entrevista con la revista Semana en la que lo acusó de haber recibido dinero del narcotraficante Samuel Santander Lopesierra y del cuestionado empresario Alfonso «el Turco» Hilsaca para la campaña presidencial de su padre, que sin embargo nunca llegó a ese destino.
A esas denuncias se suma la revelación que hizo el domingo la revista Cambio de que el hijo de Petro, diputado de la Asamblea del Atlántico, vive en un penthouse de 2.500 millones de pesos (unos 522.000 dólares) en Barranquilla y llevaba un estilo de vida que no corresponde a sus ingresos, con compras de costosas joyas y movimientos de altas sumas de dinero en una de sus cuentas bancarias.
«En el extracto de diciembre pasado consta que de esa cuenta Nicolás gastó más de 40 millones de pesos (unos 8.300 dólares) y aún así conservó un saldo superior a los 70 millones (unos 14.600 dólares). Cabe anotar que de esa cuenta no salieron pagos de arriendos o hipotecas, cuotas de vehículos o servicios públicos y solo aparece una compra de supermercado», agregó Cambio.
El jueves, horas antes de que el escándalo saliera a la luz, el presidente colombiano publicó un comunicado en el que se refería a la «información que se rumora en la opinión pública» sobre su hermano Juan Fernando Petro Urrego y su hijo mayor, por lo que pidió al fiscal general de la nación, Francisco Barbosa, «adelantar todas las investigaciones necesarias y determinar posibles responsabilidades».
Petro hizo referencia a supuestas reuniones en cárceles donde, según algunas versiones, personas de su entorno estarían haciéndose pasar por miembros del Gobierno para contactar a criminales y ofrecerles su inclusión en el programa de «paz total» a cambio de dinero, una sospecha que recae en su hermano, pero a la que no fue vinculado su hijo.
Sin embargo, ese mismo día la exesposa de Nicolás Petro, con su entrevista a Semana, destapó el escándalo de corrupción en torno al hijo mayor del presidente colombiano.