El precio del petróleo nos afecta
Por: Roberto Despradel
A lo largo de la historia dominicana hemos sido totalmente dependientes de las importaciones de hidrocarburos, los cuales utilizamos para el transporte de pasajeros y de mercancías, para la generación eléctrica, así como para otros procesos que necesitan de esta fuente de energía para motorizar maquinarias y equipos, incluyendo nuestras estufas para cocinar.
Si bien hemos realizado avances en la generación de fuentes renovables de energía, como la eólica y la solar, a pesar de sumar todas las fuentes de generación renovables, incluyendo la hidro, la generación eléctrica depende en un 82% del carbón, el gas natural y de los derivados de petróleo como el fuel oil. En el sector de transporte prácticamente el 100% depende de hidrocarburos, siendo estos gasolina, gasoil y GLP.
En el 2021 importamos más de 100 mil vehículos, apenas 700 fueron eléctricos. Para cocinar nuestros alimentos hemos migrado del carbón vegetal al gas licuado de petróleo, en la actualidad más del 93% de los hogares dominicanos utilizan el gas propano para cocinar.
Mientras en los mercados internacionales los precios del petróleo y sus derivados se encuentren bajos no representan noticia en nuestro país. Cuando suben, es otra historia. Afectan una diversidad de precios, y empujan al alza nuestra inflación.
Al iniciar el 2022 apreciamos una tendencia creciente en los precios del petróleo, los expertos indicaban que los niveles de inventarios a nivel mundial se encontraban relativamente bajos, y esto unido a la reactivación económica post covid, estaban influyendo en los aumentos tanto del petróleo como de sus derivados.
Esto se ha agravado considerablemente con la reciente situación geopolítica en Europa oriental, con la guerra iniciada entre Rusia y Ucrania. Los países europeos dependen de Rusia en suplir el 40% del consumo de Gas Natural y el 25% del petróleo. Ya hemos visto anuncios de cambios importantes en países como Alemania en torno a lo que será su política energética fruto de esta vulnerabilidad que representa esta alta dependencia con Rusia.
Para nuestro país que históricamente se suplía de Venezuela y México, en el presente dependemos de las importaciones originarias de los Estados Unidos. En el 2021 la totalidad de las importaciones de petróleo crudo se originaron desde los Estados Unidos, así como el 97% de las importaciones de gas, y el 70% de las importaciones de gasolina y gasoil. Si bien tenemos una alta concentración de importaciones estadounidenses, se trata de nuestro principal socio comercial, con cercanía geográfica, y con un tratado de libre comercio, factores que tienden a mitigar los riesgos de concentración.
Ahora bien, por esta misma razón se deriva la alta correlación entre el comportamiento de los precios de la gasolina en los Estados Unidos y la gasolina en la Republica Dominicana, los cuales a su vez reflejan una alta interdependencia con los precios del West Texas Intermidiate- WTI (una de las principales referencias para los hidrocarburos en la región). Las diferencias entre los precios de la gasolina en Estados Unidos y en nuestro país se derivan principalmente por los impuestos y los costos logísticos de traer el combustible.
En nuestro país los precios de los combustibles dependen del precio de importación, los costos logísticos y transporte, los márgenes de comercialización y los impuestos. Aproximadamente el 31% del precio de la Gasolina se atribuye a los impuestos al consumo.
Al realizar una regresión entre los precios históricos de la gasolina en la Republica Dominicana y los Estados Unidos, la correlación es muy alta, lo cual no es sorpresa pues ambos dependen de como fluctúa el WTI. Ambos precios se mueven de forma muy similar, prácticamente idénticos.
Con la situación aun desarrollándose en Ucrania y los mercados internacionales aun sin reflejar en su totalidad la incertidumbre creada, es muy probable que tengamos un periodo de altos precios y alta volatilidad en los combustibles.
Al iniciar el año las proyecciones reflejaban que para el segundo semestre del 2022 se tendría una baja en los precios del petróleo, debido al incremento de la oferta, colocando el barril alrededor de los US$70 dólares. Sin embargo, en la actualidad el barril supera los US$110. Por solo cuarta vez después de la segunda guerra mundial los países 31 países que forman la Agencia Internacional de Energía coordinadamente están liberalizando sus reservas estratégicas de petróleo. Esto debe servir para compensar la oferta. Sin embargo, estamos en un panorama incierto sobre cómo se comportará el precio del barril petróleo, con expectativas de que se mantendrá a niveles superiores a los inicialmente estimados.
Para nuestro país que dependemos en un 100% de las importaciones, nos afectará doblemente, primero en precios y costos más elevados y segundo en mayor demanda de divisas para cubrir la creciente factura petrolera.
Como país nos encontramos bien posicionados para aprovechar la apertura post covid, pero la actual situación en Ucrania podría afectar el empuje de nuestro crecimiento, impactando por los mayores precios de petróleo, commodities alimenticios, así como de otras materias primas.