En la COP27 hay un 25% más de representantes de energías fósiles que en la COP26, según Global Witness
Sharm el Sheij (Egipto), 10 nov (EFE).- Una investigación de la organización Global Witness revela que hay en la COP27, la cumbre del clima de la ONU, un total de 636 delegados relacionados con la industria de los combustibles fósiles, un 25 % más que los que había en la COP26.
El informe, que publicó este jueves Global Witness, desvela la voluntad de influir en las negociaciones multilaterales por parte del sector del gas y del petróleo sobre todo procedente de Emiratos Árabes Unidos, país que ha llevado a la cumbre -pensada para acelerar la cooperación climática internacional- a 70 personas vinculadas a las energías responsables del calentamiento.
Este país, que acogerá la próxima cumbre del clima de la ONU (COP28), ha traído a su delegación en la COP27 a 1.070 personas, mientras que a la pasada cumbre en Glasgow (Reino Unido) asistieron cerca de 176 en representación de este estado.
El total de acreditados en la cumbre de Sharm el Sheij ligados a los combustibles fósiles supera en número a cualquiera de las delegaciones de los 10 países más afectados por la crisis climática, que según GermanWatch son Puerto Rico, Myanmar, Haití, Filipinas, Mozambique, Bahamas, Bangladés, Pakistán, Tailandia y Nepal.
El segundo país con más delegados del sector de energías fósiles es Rusia, seguido de Kenia, Congo y Omán, según Global Witness, que ya el año pasado expuso que había en la cumbre del clima más lobistas de la industria fósil que ninguna delegación (incluso que la de Brasil, la mayor en número de acreditados).
Los autores de la investigación recalcaron en un comunicado que su informe se publica en el marco de un foro en el que “activistas del Sur Global, comunidades indígenas y otros que soportan de forma desproporcionada el peso de la crisis climática se han quedado fuera de las conversaciones debido a los elevados costes, los problemas de visado y las medidas represivas del país anfitrión”, denunciaron.
Portavoces de estos grupos de la sociedad civil comentaron en la nota que “esto llega en un momento en que la gente de todo el mundo está sufriendo las tensiones financieras causadas por los altos precios de la energía y millones más por los desastrosos impactos de la crisis climática”.
“En lugar de ser el comienzo de la acción climática real que se necesita, la COP27 parece que va a ser un festival de los combustibles fósiles y de sus amigos contaminantes, alentados por los recientes beneficios extraordinarios», agregaron.
Desde Global Witness también alegaron que, pese a que esta cumbre es en teoría una «COP africana», “hay más grupos de presión de los combustibles fósiles registrados que cualquier otra delegación nacional del continente africano”.
PROTESTAS DE ACTIVISTAS
La publicación del documento ha coincidido además con el día temático de la juventud, en que hay programadas diferentes protestas y cuando los asistentes a la cumbre se encontraron nada más llegar al recinto con una pancarta que rezaba “Echad a los grandes contaminadores”.
El mensaje estaba escrito en inglés y con una caligrafía similar a la del logo de Coca-Cola, empresa patrocinadora del evento que ha sido fuertemente criticada por las organizaciones ecologistas y activistas, que lo tacharon de un esfuerzo de “greenwashing” o lavado verde de cara.