Eric Adams se niega a renunciar pese a investigaciones federales y crisis en su administración
Nueva York, 25 de septiembre – En medio de crecientes investigaciones federales y la salida de varios altos funcionarios de su administración, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, aseguró este martes que no tiene intención de renunciar y seguirá concentrado en dirigir la ciudad.
Las investigaciones abarcan desde viajes del alcalde a países como Turquía, Israel, China, Qatar, Corea del Sur y Uzbekistán, hasta posibles interferencias extranjeras en su campaña política.
«Estoy hacia adelante, no renuncio. Tengo una ciudad que dirigir», afirmó Adams durante su habitual conferencia de prensa. A pesar de los interrogantes que enfrenta sobre su futuro político, Adams trató de transmitir confianza, en especial a la comunidad hispana, que ha expresado preocupación por las recientes crisis en su administración. «Esta es nuestra ciudad, mi casa, su casa, y vamos a estar bien», aseguró, intentando calmar los ánimos.
El alcalde también intentó minimizar el impacto de la investigación federal que lo involucra, así como la renuncia de varios comisionados clave de su gobierno, incluyendo los jefes de policía, salud y educación.
Adams insistió en que, a pesar de estos desafíos, sigue logrando resultados para la ciudad. “Hace ocho, nueve, diez meses, cuando esta investigación salió a la luz por primera vez, la ciudad siguió progresando. No nos detuvimos, continuamos produciendo viviendas, reduciendo el crimen, y vamos a seguir haciéndolo», afirmó con determinación.
En relación a los problemas que enfrenta su administración, Adams fue claro al decir que los obstáculos forman parte de la vida pública. «Cosas que surgen en la vida, siempre surgen.
Siempre hay algo sucediendo, y voy a mantenerme concentrado en mi misión. Voy a luchar por los neoyorquinos, siempre lo he hecho, y no voy a dejar de hacerlo», añadió, mostrándose firme ante las críticas.
A pesar de los rumores sobre posibles más renuncias dentro de su equipo, el alcalde negó que esto vaya a afectar la gestión de la ciudad. «No vamos a tener problemas para cubrir cualquiera de estos puestos. La gente quiere estar en el gobierno de la ciudad», comentó, sugiriendo que la salida de altos funcionarios es algo habitual en cualquier administración.
Uno de los puntos más tensos durante su rueda de prensa fue cuando se le preguntó sobre el comisionado interino del NYPD, Tom Donlon, quien fue nombrado recientemente tras la renuncia del comisionado Edward Cabán.
Donlon ha sido objeto de una investigación del FBI, que realizó un allanamiento en busca de documentos en su poder. Sin embargo, Adams desestimó la gravedad de esta situación, señalando que se trata de un “asunto privado” y que no tiene relación con su rol como comisionado de policía.
El alcalde también hizo hincapié en la importancia de la cooperación entre las autoridades federales y el Departamento de Policía de Nueva York, recordando que la ciudad enfrenta amenazas serias como el terrorismo y las pandillas.
«Estamos lidiando con el terrorismo, con pandillas peligrosas que cruzan nuestras fronteras, y con problemas de inmigración. Por eso es importante que las autoridades federales y la policía de Nueva York trabajen en estrecha colaboración», declaró, al tiempo que expresó su deseo de no interferir en las investigaciones en curso.
La situación se complicó aún más cuando, horas después de su conferencia de prensa, se anunció la renuncia del Canciller de Educación, David Banks, quien dejará su cargo a finales de año.
Esta dimisión se suma a una serie de salidas que han aumentado las críticas hacia la administración de Adams. Banks, en una carta dirigida al público, expresó su orgullo por los logros alcanzados durante su mandato, especialmente en momentos difíciles para el sistema educativo de Nueva York.
“Estoy increíblemente orgulloso de lo que hemos logrado y de haber trabajado junto a profesionales tan dedicados», afirmó Banks, quien destacó los avances significativos en la mejora del panorama educativo.
Sin embargo, la renuncia de Banks no hizo más que avivar las críticas contra el alcalde. El senador Gustavo Rivera, uno de los legisladores más críticos con Adams, fue especialmente duro en sus declaraciones tras conocerse esta nueva salida.
«Seis países y otra dimisión, ¡todo en un día! Esta disfunción no se parece a nada que haya visto», comentó Rivera, refiriéndose al cúmulo de problemas que enfrenta la administración del alcalde. Rivera fue aún más directo al instar a Adams a que renuncie: “Adams no es apto para liderar a la gran gente de la ciudad de Nueva York. Debería hacerle un favor a los neoyorquinos y renunciar”.
El senador Rivera también sugirió que, si Adams no dimite, los neoyorquinos deberían dejarlo fuera de sus papeletas en las próximas elecciones primarias de junio. Las declaraciones del legislador reflejan un creciente malestar en diversos sectores de la ciudad ante lo que consideran una administración que se está desmoronando rápidamente.
A pesar de las presiones políticas y de los problemas que enfrenta su gobierno, Adams continúa mostrando una postura desafiante. En su discurso, el alcalde evitó abordar de manera directa las investigaciones federales en curso y el posible impacto que podrían tener en su futuro político, prefiriendo centrarse en lo que considera logros de su gestión, como la reducción del crimen y la creación de viviendas.
Eric Adams, quien fue elegido en 2021 como un candidato prometedor para hacer frente a los problemas de la ciudad, se encuentra ahora en el centro de una tormenta política que podría poner en peligro su mandato. Las investigaciones federales y la salida de altos funcionarios han dejado a muchos preguntándose si el alcalde podrá capear esta crisis o si su administración seguirá viendo cómo se erosiona su base de apoyo.
En cualquier caso, Adams no parece dispuesto a ceder. Su mensaje es claro: seguirá al frente de la Gran Manzana, enfrentando los desafíos y negándose a dejarse intimidar por las investigaciones y las críticas.