España cerrará 2025 próximo a los 100 millones de turistas extranjeros, según el sector
Madrid, 16 Diciembre.- España se quedará este año a las puertas de los 100 millones de llegadas de turistas internacionales, una cifra «redonda e histórica» para un sector económico que aportará más de 70.000 millones de euros (82.277 millones de dólares) de superávit a la Balanza de Pagos en 2025, según las previsiones de la Mesa del Turismo.
Su presidente, Juan Molas, ha avanzado este martes en rueda de prensa que el sector turístico español cerrará el presente ejercicio mejorando los resultados de 2024, lo que confirma su fortaleza y su capacidad de adaptación a pesar del impacto de la subida de precios en el comportamiento de la demanda y en la evolución de la cuenta de negocio de las empresas.
Optimismo ante 2026
Asimismo, «encaramos 2026 con un espíritu optimista y un horizonte de crecimiento moderado, pero sostenido, respaldado por unas previsiones favorables», que se sustentan en el incremento de la reserva de ‘slots’ aéreos para la temporada y en el número de congresos y grandes eventos para el turismo MICE (reuniones, incentivos, conferencias y exhibiciones) a lo largo del año.

En principio, si no hay ningún acontecimiento internacional o nacional que, de alguna forma, perjudique la actividad turística, se prevé un primer semestre del año «de plena normalidad e incluso con algún pequeño incremento en algunos meses en relación al 2025, con lo cual podemos tener un 2026 francamente bueno», ha estimado.
Molas ha destacado que el sector del campin, al que se ha mostrado poca atención en términos generales, está teniendo una temporada «extraordinaria» y va a tener, en principio, un 2026 «óptimo» porque la inversión que se está haciendo a nivel privado en este sector es muy importante.
«No siendo un porcentaje de volumen muy importante, sí lo es porque crea y ayuda a mejorar la marca España», ha subrayado Molas, para quien hay otro sector que tiene una cierta demanda en relación a otros años como es el turismo sanitario y el de incentivos y de congresos, cuyo gasto por cliente y día es, además, muy superior a la media.
Vigilantes ante la creciente competencia en el Mediterráneo
No obstante, Molas ha advertido de que este pronóstico favorable no debe conducir a la autocomplacencia y, en su opinión, el sector debe mantenerse vigilante ante la creciente competencia de destinos que ganan cuota en el Mediterráneo como Grecia, Chipre, Turquía, Croacia o los más recientemente incorporados: Montenegro y Albania.
Estos destinos se perfilan como rivales muy sólidos de precio y novedad, lo que exige que seamos capaces de reforzar la diferenciación, la calidad y la sosteniblidad como elementos distintivos de la propuesta turística española, ha agregado.
Lamentablemente, «estamos atravesando un momento político diferente, por no decir complicado, o muy complicado, en donde la no aprobación de los presupuestos -ya llevamos 3 años sin ellos- está limitando naturalmente muchas inversiones, ha recordado.
Hemos de convencer a los partidos políticos, sobre todo aquellos que tienen presencia en todo el territorio, de que es necesario un plan nacional de inversiones turísticas, pero a 15 años como mínimo (en infraestructuras, movilidad, vivienda, digitalización o regeneración de los destinos maduros, entre otros). EFE

