Estancada la reforma del Código Penal en la Cámara de Diputados
Santo Domingo, 19 de julio – En la Cámara de Diputados de la República Dominicana persiste una falta de «suficiente voluntad política» para lograr convertir la reforma del Código Penal en ley mediante la aprobación del proyecto en segunda lectura.
Esta es la percepción de algunos de los 20 integrantes de la comisión especial que estudia los tres proyectos destinados a modificar el marco penal del país. Todo esto ocurre cuando solo restan cinco días para que culminen las labores legislativas del actual período.
Rafaela Alburquerque, una de las diputadas del Partido Revolucionario Moderno (PRM), expresó con firmeza que no hay intenciones de aprobar el proyecto antes de que finalice la legislatura actual. Al ser interrogada por la prensa, Alburquerque respondió con un rotundo «no», subrayando que el Congreso Nacional se encuentra en un bucle donde los diputados no concentran sus esfuerzos en promover un moderno sistema penal que contiene alrededor de 75 nuevas tipificaciones criminales.
«De nuevo pasa lo mismo, de nuevo los mismos intereses, de nuevo los mismos choques y aquí hay que determinar si queremos seguir con un código atrasado o con uno nuevo», declaró Alburquerque. La representante del oficialismo lamentó que el debate en torno a la elaboración de los 419 artículos del nuevo Código Penal esté centrado en discutir algunos detalles en lugar de reconocer las importantes adiciones penales propuestas.
Fiordaliza Peguero, diputada del Partido de la Liberación Dominicana (PLD), coincidió con Alburquerque, calificando de «inexistente» la voluntad política en la Cámara Baja.
Por su parte, Luis Henríquez, vocero de la bancada peledeísta, señaló al presidente de la República por no enfrentar los intereses políticos y sociales que impiden que la sociedad dominicana reciba un documento jurídico actualizado. «Desde Palacio (la Presidencia), aparentemente, ya no existe la voluntad política como la demostraron los senadores para que la República Dominicana tenga un nuevo Código Penal», comentó Henríquez.
Alburquerque y otros congresistas coinciden en que la propuesta, que ha sido aprobada en dos lecturas por el Senado y favorecida en primera discusión por los diputados, deberá ser modificada en algunos mandatos, lo que significa que regresará a la sala legislativa del Senado para repetir el trámite inicial y ser conocida en dos lecturas.
Ayer, los diputados aprobaron extender el plazo hasta el miércoles para la comisión especial que estudia los tres proyectos del Código Penal, con el objetivo de continuar los estudios correspondientes. Sin embargo, si no se cumple con el plazo, la aprobación absoluta de la pieza se postergaría para la próxima legislatura, que iniciará el 16 de agosto. Considerando que el actual periodo legislativo finaliza el 25 de julio, solo un día después de que se cumplan los seis días, la situación parece cada vez más complicada.
En cuanto a la posibilidad de una legislatura extraordinaria, aunque sería «lo correcto», el diputado Eugenio Cedeño, del PRM y miembro de la comisión especial, no está convencido de que el presidente Luis Abinader solicite al Congreso Nacional abocarse a una legislatura extraordinaria para el conocimiento de las iniciativas del marco penal y otros temas de interés colectivo.
Cedeño recomendó al presidente convocar al órgano constitucional a una legislatura extraordinaria. «Este Código no se termina a menos que haya una legislatura extraordinaria. Yo creo que es necesario y le sugeriría al presidente que lo haga para que sea este Congreso el que concluya con el Código», destacó Cedeño.