Hamilton, a salvar en Arabia Saudí la primera ‘bola de título’ de Verstappen
Madrid, 2 dic (EFE).- El inglés Lewis Hamilton (Mercedes), siete veces campeón del mundo de Fórmula Uno, intentará salvar este fin de semana, en la debutante Arabia Saudí, la primera ‘bola de título’ que dispondrá el neerlandés Max Verstappen (Red Bull); que, a falta de dos carreras para la conclusión, lidera el Mundial con ocho puntos de ventaja sobre él (351,5 frente a 343,5).
Hamilton, de 36 años, vencedor de las dos últimas pruebas, en Sao Paulo (Brasil) y en Qatar, ha puesto al rojo vivo el Mundial más disputado de los últimos años, en el que ambos contendientes dependen de sí mismos. El astro inglés capturará una inédita octava corona si gana las dos carreras que faltan; pero Verstappen, de 24, ya podría festejar título el próximo domingo en Yeda: si gana con vuelta rápida y Hamilton no mejora un sexto; si vence y el británico no supera el séptimo; si acaba segundo con el giro rápido y el heptacampeón no mejora el décimo; o si es segundo y el capitán de Mercedes no puntúa.
Arabia Saudí , que albergará la penúltima de las 22 carreras que conforman el Mundial, se convertirá este fin de semana en el cuarto país de Oriente Medio que alberga un Gran Premio de F1, después de Barein (2004), Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos, 2009) -que cerrará el certamen una semana después- y Qatar, debutante hace dos semanas en Losail. Donde, al acabar tercero, por detrás de ‘Sir Lewis’ y de ‘Mad Max’, brilló de nuevo el español Fernando Alonso (Alpine), que firmó su podio número 98 en la categoría reina, el primero en más de siete años. El doble campeón mundial asturiano contuvo el arreón final del mexicano Sergio Pérez (Red Bull), que hubo de conformarse con la cuarta plaza en una carrera que el otro español, el madrileño Carlos Sainz (Ferrari), acabó séptimo.
De las orillas del Golfo Pérsico, la F1 pasa a las del Mar Rojo, donde Yeda albergará el primer Gran Premio de Arabia Saudí de la historia. Una prueba que se disputará en la segunda pista más larga del campeonato, después de la de Spa-Francorchamps, sede del Gran Premio de Bélgica (7.004 metros).
La de Yeda mide 6.175 metros, tiene 27 curvas y está llamada a convertirse en el circuito callejero más rápìdo del mundo. Y el domingo está previsto que se den, de noche y con luz artificial, un total de 50 vueltas: para completar un recorrido de 308,7 kilómetros.
El mayor quebradero de cabeza para el suministrador único de neumáticos (Pirelli), en una pista recién construida y que se estrenará este fin de semana (la de Losail, en Qatar, ya albergaba el Mundial de motociclismo desde 2004) fue la elección de los compuestos. Finalmente, se optó por la gama intermedia: los C2 (duros, reconocibles por la raya blanca), C3 (medios, raya amarilla) y C4 (blandos, roja); con los que se rodará a partir de este viernes, cuando arranquen los entrenamientos libres. Unos ensayos que se completarán el sábado, horas antes de la sesión de calificación, que ordenará la parrilla de salida de la carrera dominical.
Alonso, de 40 años, que, después de dos ausente de ella -en los que ganó, entre otros, el Mundial de Resistencia (WEC) y las 24 Horas de Le Mans (Francia, dos veces)- reconfirmó en Qatar lo que había declarado a Efe en Austria hace un par de meses: que «en la F1 lo importante no es la edad, sino el cronómetro». El genial piloto asturiano regresó a un podio de la categoría reina al que no subía desde julio de 2014, cuando fue segundo, con un Ferrari, en el Gran Premio de Hungría de ese año.
Fue elegido ‘Piloto del Día’ y mereció los elogios de casi todo el mundo. «Todos sabemos lo bueno que es», afirmó el líder del Mundial sobre Alonso; décimo en el Mundial, con 77 puntos: 17 más que su compañero francés Esteban Ocon, quinto en Qatar.
Los dos pilotos de Alpine -que en Losail reforzaron el quinto puesto en el también apretado Mundial de constructores, que lidera Mercedes con 546,5 puntos, cinco más que Red Bull- fueron dos de las grandes estrellas en la Gala del Balón de Oro de fútbol, en París. Donde entraron en el teatro que albergó el acto portando los trofeos que se llevaron el argentino Lionel Messi (por séptima vez) y la española Alexia Putellas.
Sainz, de 27, es séptimo en el Mundial. El madrileño de Ferrari suma 145,5 puntos, sólo seis y medio menos que su colega monegasco Charles Leclerc; y también tiene a tiro, a falta de dos carreras, la quinta plaza que ocupa su ex compañero inglés Lando Norris (McLaren), que lo supera en 7,5. La ‘Scuderia’ se ha afianzado en el tercer puesto del certamen por equipos, en el que suma 297,5 y mejora en 39 puntos y medio a McLaren.
‘Checo’, nacido hace 31 años en Guadalajara (Jalisco), que al ganar este año en Azerbaiyán sumó su segunda victoria en la F1, es cuarto en el Mundial, con 190 puntos. Y, aparte de aportar su talento en favor de Verstappen y de Red Bull, aún opta, en las dos carreras finales, a acabar el certamen en tercera posición: la que ocupa ahora el finlandés Valtteri Bottas (Mercedes), que lo supera en trece puntos.
Adrian R. Huber