Impacto del gobierno de Trump en la promoción de un Código Penal conservador en República Dominicana
Santo Domingo, 21 de enero. Con la reciente toma de posesión de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, el senador dominicano Ramón Rogelio Genao ha aprovechado el nuevo panorama político internacional para impulsar una versión del Código Penal que elimina las causales para la despenalización del aborto y excluye las garantías legales contra la discriminación por orientación sexual.
El senador Genao, representante del Partido Reformista Social Cristiano (PRSC) por La Vega, argumenta que el cambio en el gobierno estadounidense favorece la aprobación de un Código Penal alineado con valores conservadores.
Según Genao, bajo la administración de Trump, que rechaza abiertamente el aborto y la ideología de género, la República Dominicana estará menos expuesta a presiones internacionales para modificar sus leyes en estas materias.
“Las razones por las que el Código Penal ha corrido la suerte de ping pong legislativo, de aprobarse aquí y perimir allí, es fundamentalmente por una presión externa del gobierno y la embajada de los Estados Unidos”, declaró Genao, quien considera que este nuevo contexto político permitirá que el Congreso analice la propuesta “sin más interferencias”.
El proyecto presentado por el senador propone mantener la penalización absoluta del aborto, en coherencia con su interpretación de la Constitución dominicana, que protege la vida desde la concepción hasta la muerte.
Asimismo, elimina del texto cualquier referencia a términos asociados a la ideología de género y no incluye la discriminación por orientación sexual como un delito merecedor de sanción penal.
La propuesta será discutida en el Senado a partir del 27 de febrero, cuando inicia la nueva legislatura del Congreso. Si es aprobada en dos lecturas, deberá ser remitida a la Cámara de Diputados, donde enfrentará el mismo proceso antes de ser promulgada o observada por el Poder Ejecutivo.
El proyecto elimina las tres causales que permitirían interrumpir un embarazo: cuando la vida de la madre está en peligro, cuando el embarazo es producto de una violación o incesto, y cuando el feto presenta malformaciones incompatibles con la vida.
Además, excluye las disposiciones que penalizan la discriminación por orientación sexual, puntos que han generado debates y divisiones en el Congreso por años.
El Código Penal ha permanecido estancado durante más de dos décadas. En 2016, estuvo a punto de convertirse en ley, pero fue observado por el entonces presidente Danilo Medina, quien exigió que se incluyeran las tres causales.
Más recientemente, en julio de 2024, el presidente Luis Abinader afirmó que la propuesta requería un análisis más profundo, reflejando la complejidad de este debate que trasciende generaciones y líneas políticas.
Con este nuevo intento, el senador Genao busca que el Congreso apruebe una versión del Código Penal acorde a su visión conservadora, aprovechando el respaldo implícito que percibe en la administración Trump para impulsar su iniciativa sin las resistencias que, según él, han obstaculizado el proceso en el pasado.