La “democracia” venezolana
J.C. Malone
La democracia, decía Enrique Pinti el humorista argentino, es como la saliva, todos la tienen en la boca, nadie sabe de dónde viene ni para qué sirve.
Antes de hablar de la “democracia” en Venezuela, veamos lo que fue la democracia griega, y la estadounidense. En la Antigua Grecia no todos eran “demos”; mujeres, artistas, y esclavos no contaban, ¿Quiénes quedaban? El mismo microscópico grupúsculo que controla todo.
En la “democracia” estadounidense, las mujeres, y los esclavos no tenían derecho al voto, no eran “demos”, solo votaban los blancos dueños de plantaciones. Gracias a la “evolución y avance” de las sociedades, hoy todos votamos, pero ¿qué importancia tiene eso?
Absolutamente ninguna, no importa quién gane las elecciones, la élite que controla desde la Antigua Grecia hasta hoy, controlará el presupuesto nacional. Nosotros, el “demos” votamos y pagamos impuestos, pero la élite se reparte ese dinero en contratos oficiales.
Nada podemos hacer. Cambian los gobiernos y ninguno termina el sistema de alcantarillado pluvial o sanitario, ni los caminos, ni las aceras, ni los acueductos ni nada importante para la comunidad. Porque nosotros los elegimos, nos cobran impuestos, cada vez más, para financiar la vida de la élite política y económica.
Ni Venezuela ni Cuba tienen “democracia” porque un grupo político asaltó el poder y se consolidó, ahora son una élite, y la élite nunca suelta el poder. Esos pueblos no son “democráticos” porque carecen de una élite económica que manipule el sistema político en su favor, esos pueblos viven estrechez económica. Venezolanos y cubanos padecen muchísimas estrecheces económicas, aproximadamente dos de los 11 millones de cubanos huyó de su país, por eso. Alrededor de ocho de los 29 millones de venezolanos huyó por las mismas razones.
República Dominicana es el “faro democrático” en el Caribe, pero tres de los 11 millones de dominicanos huyeron del país por razones económicas.
Necesitamos auténtica democracia política promoviendo una verdadera democracia económica, eso es lo que nuestros pueblos esperan y necesitan. Lo demás es teatro, entretenimiento, espectáculo, manipulación y distracción.
Listín Diario
