La Fed da luz verde a la compra de las filiales de Credit Suisse en EE.UU. por UBS
Washington, 14 abr (EFE).- La Reserva Federal de Estados Unidos (Fed) anunció este viernes que ha aprobado la petición del banco suizo UBS de adquirir las filiales estadounidenses de Credit Suisse.
La noticia llega después de la compra, avalada por el Gobierno suizo, de Credit Suisse por parte de su competidor, que lo adquirió por 3.000 millones de francos suizos (unos 3.400 millones de dólares) para salvarlo de una posible quiebra el mes pasado.
Según la Fed, UBS se ha comprometido a proporcionar a la Junta de la Reserva Federal un plan para combinar los negocios en EE.UU. de las dos firmas suizas, que deberá ser actualizado cada trimestre.
El plan deberá reflejar el compromiso de UBS «de cumplir con estándares de prudencia más rigurosos, incluidos estándares de liquidez», dijo la Fed en un comunicado.
La adquisición de Credit Suisse por UBS fue una de las ramificaciones más importantes de la incertidumbre bancaria desatada en EE.UU. tras la quiebra en marzo del Silicon Valley Bank (SVB), una firma especializada en empresas tecnológicas y emergentes cuya situación financiera había empeorado como consecuencia de las subidas de tipos de la Fed para combatir la inflación.
El pánico se llevó por delante a otra firma estadounidense, el Signature Bank, y casi acaba con una tercera, el First Republic, que finalmente tuvo que ser rescatado por los principales bancos del país con 30.000 millones de dólares.
A raíz de la crisis, los principales responsables económicos del país, y en particular la secretaria del Tesoro, Janet Yellen, y el presidente de la Fed, Jerome Powell, han tratado de asegurar a los ciudadanos y a los mercados que la situación no desembocará en una crisis financiera.
El banco central estadounidense, de hecho, ha puesto en marcha un nuevo fondo para que los bancos que necesiten asegurar los depósitos de sus clientes tengan dinero para hacerlo, y aumentó la frecuencia con la que ofrece operaciones de cambio de divisas para asegurar que hay suficientes dólares disponibles en el sistema financiero.