La hegemonía del dólar
Por Manolo Pichardo
El plan adoptado en Bretton Woods, que inundó al mercado mundial de dólares, creó el eurodólar, la nube de eurodólares y el retorno de los dólares a los Estados Unidos atraídos por las altas tasas de interés y la seguridad, se convirtió en una trampa que encareció la vida en EE.UU. y quitó competitividad al país frente a otras economías, pero también creó un efecto negativo para países que, debiendo usar el dólar como moneda de cambio en sus transacciones comerciales internacionales, se quedaban sin la divisa generándoles un problema para la compra de bienes extranjeros. El punto es que el vaivén del dólar, moneda estadounidense y de intercambio mundial, provocaban que las medidas que se tomaran en Estados Unidos afectaban la economía global, como ocurrió cuando para sostener su intervención militar en Vietnam y sus bases militares por todo el mundo, emitió dinero sin respaldo en la producción de bienes, lo que provocó el abaratamiento del dólar y proceso inflacionario en EE.UU. que se extendió por todo el mundo provocando su pérdida de confianza.
La pérdida de confianza en la moneda generó tal nerviosismo que sus dueños en el extranjero por su respaldo en oro, de acuerdo a lo establecido en Bretton Woods, salieron a cambiarla por el oro que el Tesoro guardaba en sus bóvedas. La corrida alcanzó tal proporción que las reservas almacenadas en Fort Knox comenzaron a vaciarse hasta forzar al gobierno de Richard Nixon a adoptar medidas de shock que quebraron los acuerdos de 1944 en el marco de la reunión de las ONU que dio nacimiento a un nuevo orden económico mundial.
La crisis de credibilidad enfrentada por el dólar no lo liquidó como moneda de reserva e intercambio comercial a nivel global, pues tras las medidas de Nixon, que condujeron hacia el libre cambio de divisas con la desaparición del patrón oro, Estados Unidos encontró otra forma de mantener el billete verde como dominante frente a los demás, cuestión que se mantuvo hasta la aparición del Euro el 1 de enero de 2002, luego de los acuerdos de Maastricht que condujeron el proceso de integración europeo hacia la unión política en 1991 ¿Pero cuál sería esa manera de mantener el dominio del billete verde? ¡El petrodólar!
Eliminado el patrón oro, se produjo un acuerdo entre Estados Unidos y Arabia Saudita que consistió en que el país árabe vendiera el crudo utilizando como única moneda al dólar a cambio de armamentos y protección de sus bases petrolíferas, todo en un contexto de tensiones bélicas como la guerra de Yom kipur que derivó en la primera crisis del petróleo. Así que de lo pactado entre estos dos países, y extendido al resto de los productores árabes, nace el petrodólar como patrón moneda que le permitió a los Estados Unidos mantener la hegemonía financiera dos años después del abandono unilateral de los acuerdos de Bretton Woods que para la década de los 70 hacía crisis agotando el modelo que sirvió por casi 6 lustros a la economía e intereses estadounidenses.
Hoy, con la recomposición de los mercados, la creación de alianzas o bloques económicos que apuestan desde hace un tiempo al impulso de transacciones en monedas alternativas al dólar, más las consecuencias de las sanciones a Rusia y la suma de la gran masa monetaria que para enfrentar la crisis económica derivada de la pandemia, ha devaluado el billete verde, éste pierde confianza y se debilita como ocurrió en los 70 sin que hasta ahora se vea una estrategia como la del petrodólar que le permita a EE.UU. mantener la hegemonía monetaria.