Las elecciones del martes determinarán los próximos dos años de la agenda del presidente Biden y darán forma al futuro de la democracia.

Por Claire Moisés

The New York Times

En el sentido de las agujas del reloj desde arriba a la izquierda: Las Vegas, Athens, Georgia y Atlanta este fin de semana. En el sentido de las agujas del reloj desde arriba a la izquierda: Bridget Bennett, Audra Melton y Nicole Craine para The New York Times

Lo que está en juego

Para comprender la importancia y las consecuencias de las elecciones de mitad de período del martes, hablé con Astead Herndon, un reportero político que ha estado cubriendo este ciclo electoral para el podcast del Times “The Run-Up”.

Claire: Hola, Astead. Vivo en Europa, donde muchas personas recién ahora están comenzando a sintonizar con los exámenes parciales. ¿Cómo les explicaría a ellos y a otros que necesitan un repaso, por qué es importante esta elección?

En cambio: si los republicanos recuperan la Cámara, cambiaría el alcance de la política estadounidense. Sabemos que intentarían detener la agenda del presidente Biden. Una Cámara republicana dañaría la capacidad de Biden para responder a los desafíos internos en sus términos, como la inflación y las crisis globales: Kevin McCarthy, el líder republicano de la Cámara, ha señalado que los republicanos podrían dejar de aprobar la ayuda para Ucrania.

También hemos visto un aumento global en los temores de un colapso democrático. Si Estados Unidos elige legisladores que difunden teorías de conspiración sobre las elecciones y prometen derribar los principios de la democracia, eso envalentonará a los líderes autocráticos en otros países y debilitará la posición de Estados Unidos en el mundo.

Estas elecciones intermedias también son importantes porque podrían señalar el comienzo de una era política aún más divisiva. No debemos asumir que estamos en el piso de la división, vamos a bajar.

Cuando dice que los republicanos intentarían bloquear a Biden, ¿cómo se vería eso?

Si los republicanos se hacen cargo del Congreso, algunos miembros presionarán a su nuevo presidente de la Cámara para que inicie un proceso de juicio político contra el presidente y los miembros de su gabinete, como Merrick Garland, el fiscal general. Algunos republicanos han estado listos para acusar a Biden desde que asumió el cargo. Sus quejas son sobre política y política, no acusaciones de los tipos de abusos de poder que históricamente han sido motivo de juicio político. McCarthy ha tratado de minimizar las conversaciones sobre juicio político últimamente, viéndolo como algo polarizador, pero es casi seguro que las bases de la extrema derecha presionarán por ello.

Llevas años cubriendo política. ¿A qué crees que deberíamos prestar más atención?

Los demócratas están pidiendo a su base que se una detrás de la idea de proteger la democracia, eso es lo que ha dicho Biden. Pero esa base es en su mayoría estadounidenses de clase trabajadora y personas de color. Y muchas de esas personas sienten que el sistema no ha proporcionado un cambio tangible y significativo en los temas que más afectan su vida cotidiana, como la vivienda, los salarios o la seguridad pública.

Una mujer en el episodio de la semana pasada de “The Run-Up” nos dijo que la democracia nunca le ha funcionado. Ella ha soportado la peor parte de la pobreza. Su principal problema era la vivienda. Eso no es de lo que habla el Partido Demócrata. Si bien Biden y los demócratas aprobaron fondos relacionados con la vivienda, ese dinero se redujo drásticamente de los niveles que la mayoría de las personas que se enfocan en el tema dicen que era necesario para lograr un cambio duradero.

También creo que los medios han hecho muy poco para explicar las ventajas intrínsecas de los republicanos. Su control de las legislaturas en algunos estados disputados está respaldado por manipulaciones. Recientemente hicimos un episodio del podcast sobre Wisconsin y cómo los republicanos han manipulado la legislatura estatal de tal manera que efectivamente han dejado a los demócratas fuera del poder.

Hay tantas carreras que puede ser difícil hacer un seguimiento. ¿Cuáles vale la pena seguir?

Depende de lo que te importe. Digamos que es una acción de la Casa Blanca sobre la codificación del derecho al aborto en la ley federal: observe las contiendas en las que el control demócrata de la Cámara está en juego y las contiendas por el Senado en estados como Nevada, Wisconsin y Georgia. Si los demócratas no ocupan ambas cámaras del Congreso, eso no va a suceder.

Si lo que le preocupa es la solidez de la democracia, observe las contiendas estatales, como las de gobernador, secretario de estado y legislaturas estatales, especialmente con el inminente caso de la Corte Suprema que podría dar más poder sobre las elecciones a las legislaturas estatales. También puede mirar a Wisconsin y Arizona, donde hay mucho en juego, no solo para esta elección, sino también para la capacidad de los demócratas de ganar carreras futuras. Los candidatos republicanos a gobernador en esos estados, Tim Michels en Wisconsin y Kari Lake en Arizona, han sido abiertamente hostiles hacia los elementos de nuestro sistema electoral, incluidas las boletas por correo y la votación anticipada, que muchos demócratas dicen que son necesarios para que tengan un oportunidad de éxito.

¿Cuándo podríamos conocer algunos resultados?

Los números iniciales pueden darnos indicios de tendencias más amplias. En 2016 y 2020, los resultados en Florida nos dieron buenas señales del nivel de entusiasmo de determinados bloques de votantes. Si los republicanos ganan Florida por mucho, será una mala señal para los demócratas. Los márgenes de Virginia, por ejemplo, podrían decirnos si los jóvenes con educación universitaria whi