Liberación del encaje legal: una apuesta por dinamizar la economía dominicana

Santo Domingo, 28 de noviembre – La decisión del Banco Central de la República Dominicana (BCRD) de liberar RD$35,335 millones del encaje legal ha sido ampliamente discutida y valorada como un estímulo potencial para la economía, particularmente en el sector construcción.

Sin embargo, economistas y líderes empresariales advierten que el impacto de esta medida dependerá de la capacidad del país para superar barreras estructurales, como la falta de mano de obra y las limitaciones en la transmisión de las políticas monetarias a la economía real.

Steven Puig, presidente ejecutivo del Banco BHD, y René Grullón, vicepresidente sénior del Banco Popular Dominicano, destacaron que esta medida ayudará a reducir las tasas de interés activas y promoverá una mayor liquidez en el sistema financiero. Según Grullón, la acción del BCRD crea un mecanismo para «acelerar un poquito el proceso de baja de la tasa activa que el país necesita tanto».

Un sector construcción rezagado
La construcción, uno de los pilares de la economía dominicana, ha crecido un 4.7 % en los primeros diez meses de 2024, un desempeño modesto si se compara con el 10 % registrado en 2019, antes de la pandemia. La Junta Monetaria ha decidido enfocar una parte significativa de los fondos liberados en este sector, con el objetivo de incentivar tanto la construcción como la adquisición de viviendas.

De los RD$35,335 millones liberados, un 40 % (RD$14,142 millones) se destinará exclusivamente a viviendas cuyo precio no exceda los RD$5,025,380.75, una medida diseñada para beneficiar a los compradores de viviendas de bajo costo. El resto, equivalente a RD$21,213 millones, será asignado a proyectos de construcción y adquisición de viviendas en general.

Obstáculos persistentes en el sector
El economista Guillermo Caram advierte que, aunque las medidas financieras no son negativas, el sector construcción enfrenta retos más inmediatos, como la escasez de mano de obra, agravada por las deportaciones masivas de trabajadores haitianos. Según Caram, esta situación compromete la capacidad del sector para aprovechar las facilidades económicas ofrecidas por el Banco Central.

“La construcción no se reactivará hasta tanto se resuelva el problema principal que afecta a esa industria: la escasez de mano de obra como consecuencia de las arbitrarias deportaciones gubernamentales a haitianos», señaló Caram, enfatizando que, sin solucionar este problema, los recursos liberados podrían terminar siendo utilizados para refinanciar deudas atrasadas, beneficiando más a las estadísticas bancarias que a la economía real.

Por su parte, Haivanjoe Ng Cortiñas señaló que la liberación del encaje legal es una respuesta a la ineficiencia en la transmisión de la política monetaria. Aunque el Banco Central redujo su tasa de referencia del 8.5 % al 6.25 %, las tasas activas bancarias han aumentado, pasando del 12.41 % en junio de 2023 al 16.20 % en noviembre de 2024.

“Ante el fracaso del efecto transmisión de la tasa monetaria hacia las tasas de interés bancarias, al Banco Central no le ha quedado otro camino que liberar el encaje, en un ambiente de inflación por debajo de la meta y con una insuficiencia de masa monetaria circulando, inferior al programa monetario», explicó Ng Cortiñas.

Reacciones del sector empresarial y las mipymes
La Confederación Dominicana de Micro, Pequeñas y Medianas Empresas de la Construcción (Copymecon) expresó su apoyo a la medida, subrayando su potencial para dinamizar el sector. Sin embargo, Eliseo Cristopher, presidente de Copymecon, insistió en que es fundamental priorizar el acceso de las mipymes a estos recursos, dado su papel esencial en el desarrollo de la construcción a menor escala.

En una línea similar, la Asociación Dominicana de Constructores y Promotores de Viviendas (Acoprovi) respaldó la decisión de liberar los fondos, destacando que representa «un paso significativo hacia el fortalecimiento del acceso a viviendas y la dinamización del sector de la construcción». Según Acoprovi, estas medidas son fundamentales para el desarrollo económico y social del país.

Roberto Herrera, presidente de la Cámara Americana de Comercio de la República Dominicana (AmchamDR), calificó la medida como «muy positiva». En su opinión, resolverá parte de los desafíos que enfrentan los desarrolladores por la falta de acceso a financiamiento, lo cual contribuirá a un repunte en la actividad económica.

Expectativas para 2025
Steven Puig, del Banco BHD, consideró que la liberación del encaje legal llega en un momento oportuno para estimular la economía y preparar al país para un 2025 prometedor. “Vamos a terminar el año con muy buenas noticias. El gobernador del Banco Central nos anunció que vamos a crecer más del 5 % para el final del año. Creo que este estímulo nos servirá de buena base para entrar al 2025 con garantías», afirmó.

René Grullón, del Banco Popular, coincidió con Puig, señalando que la medida tendrá repercusiones positivas para el sector construcción, lo que, a su vez, beneficiará a la economía en general.

Un balance necesario entre política monetaria y realidad económica
A pesar del optimismo de algunos sectores, los expertos advierten que la efectividad de la liberación del encaje legal dependerá de cómo se implementen las políticas complementarias. El economista Haivanjoe Ng Cortiñas recordó que, aunque la medida busca corregir las fallas en la transmisión de la política monetaria, no resolverá por sí sola los problemas estructurales de la economía dominicana.

Por otro lado, Guillermo Caram reiteró que la política económica debe abordar problemas fundamentales, como la escasez de mano de obra y la asignación efectiva de los recursos, para garantizar que el impacto sea tangible en el crecimiento económico y no se limite a un alivio temporal en las estadísticas financieras.

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