Llegan a Venezuela los tripulantes liberados del avión retenido en Argentina
Caracas, 16 sep (EFE).- Los 12 tripulantes del avión venezolano-iraní que fueron liberados el martes, tras más de tres meses retenidos en Buenos Aires, llegaron este viernes a Venezuela, mientras permanecen en Argentina siete miembros del grupo y la aeronave, objeto de investigación por posibles vínculos con el terrorismo internacional.
Los liberados, entre los que se encuentran 11 venezolanos y un iraní, aterrizaron cerca de las 18.30 hora local (22.30 GMT) en el Aeropuerto Internacional de Maiquetía, donde fueron recibidos, minutos después, entre aplausos de familiares, empleados del aeropuerto y personas que transitaban por la terminal.
La única mujer del grupo, Victoria Valdiviezo, aseguró que «se hizo justicia», y negó que ninguno de los tripulantes fuera terrorista o espía, como -aseguró- fueron calificados.
«Ya no tengo lágrimas de tanto que he llorado, desde que salí de Argentina llorando, de felicidad. Se hizo justicia. Estamos aquí en nuestra tierra (…) nos tildaron de todo, de terroristas, de espionaje, pero nosotros no somos así, somos venezolanos trabajadores que tenemos que salir todos los días a la calle para poder traer el sustento a nuestra casa», dijo.
Otro de los liberados, cuyo nombre no facilitó a la prensa a su llegada, negó que hubiera alguna razón para que se produjera la retención de la aeronave y de su tripulación, y reivindicó la liberación inmediata de los siete compañeros que continúan en el país austral.
El ministro de Transporte y presidente del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa), Ramón Velásquez, quien también los esperó en el aeropuerto, exigió, igualmente, que sean liberados todos los miembros de la tripulación para que puedan regresar a su país.
La aeronave, propiedad de Emtrasur -filial de Conviasa-, fue retenida en el Aeropuerto Internacional de Buenos Aires, en la localidad bonaerense de Ezeiza, el 6 de junio para ser investigada por posibles vínculos con el terrorismo internacional.
Desde entonces, el Gobierno venezolano rechazó la retención, que calificó de «secuestro» y exigió la puesta en libertad de la tripulación.