Lola, la hija de Madonna, se afianza como modelo
Redacción Cultura, 27 oct (EFE).-Tras convertirse en musa de Jean Paul Gaultier y Marc Jacobs e imagen de Stella McCartney o Swarovski, Lourdes María, la hija de Madonna, se afianza como modelo tras desfilar para Bottega Veneta y se convierte en uno de los rostros más deseados del momento.
Con 25 años, Lourdes María Ciccone León, Lola para sus amigos, se ha convertido en una joven promesa en el universo de la moda y la belleza.
Las marcas de lujo se la rifan. De hecho, ha sido la protagonista del desfile de la nueva colección primavera-verano 2022 de la firma Bottega Veneta que presentó en Detroit.
La hija de Madonna y del gurú del ‘fitness’ Carlos León, ha lucido un vestido de silueta relajada, «con materiales innovadores que permiten alterar la forma de las piezas», explican en nota de prensa desde la firma.
Hasta ahora, la primogénita de la reina del pop, Lourdes María (Los Angeles, California, Estados Unidos, de 1996), había realizado con éxito campañas publicitarias, Sin embargo, ha dado un paso más y quiere afianzarse sobre las pasarelas.
Durante la semana de la moda de Milán desfiló para Versace, donde compartió protagonismo con Gigi Hadid, Dua Lipa y la modelo Naomi Campbell.
La presentación de la nueva colección dela firma de lencería de Rihanna, Savage x Fenty, dio el pistoletazo de salida a su nueva aventura.
Con solo 13 años, su madre la nombró directora creativa de la línea de ropa, Material Girl, y ya había formado parte del equipo de vestuario en las giras internacionales de su madre.
Ahora, esta joven que se declara feminista y ha heredado de su madre el compromiso activista, maneja la industria textil con su imagen independiente, arrolladora y envuelta con un halo rebelde que tanto gusta a la Generación Z.
Bailarina de formación, toca el piano y también hace sus pinitos como actriz. Lola cuenta con una trayectoria en moda desde que Stella McCartney le diera su primera oportunidad en 2016. Después hizo una «performance» en Miami para la firma española Desigual y se convirtió en imagen de Marc Jacobs y Burberry.