Los precios del gas ahora han caído durante más de un mes.

Por Germán López

The New York Times

La caída de los precios de la gasolina podría ser una buena noticia para la estabilidad política y social Jason Henry para The New York Times

Algunas buenas noticias

Después de meses de que los precios de la gasolina encarecieran la vida, han comenzado a bajar silenciosamente, proporcionando un alivio financiero para muchos estadounidenses.

El precio promedio a nivel nacional esta semana fue de $ 4,49 por galón, por debajo del máximo de $ 5,01 en junio. El precio promedio de la gasolina sigue siendo aproximadamente $1.30 más alto que hace un año, pero ahora ha caído durante más de un mes.

Fuente: EE. UU. Administración de Información Energética

Esa es una buena noticia para los consumidores: los precios más altos de la gasolina afectan no solo a las personas que llenan sus automóviles, sino también, a través de los costos de transporte más altos, al precio de casi todo lo demás.

La caída de los precios también es una buena noticia potencial para la estabilidad política y social. Debido a que los precios de la gasolina son tan visibles, publicados en letreros gigantes en todo el país, tienen un impacto enorme en cómo los estadounidenses sienten que van las cosas, dicen los expertos. El sentimiento puede extenderse más allá de las preocupaciones financieras.

Considere la invasión de Rusia a Ucrania, que hizo que los precios del gas se dispararan en Occidente cuando Europa prometió dejar de depender del petróleo y el gas rusos. Los líderes estadounidenses y europeos han estado preocupados desde que comenzó la guerra de que el aumento de los precios de la gasolina podría dañar el apoyo público a los esfuerzos contra Rusia, porque la gente podría llegar a ver el costo personal como demasiado alto. Por lo tanto, la caída de los precios del gas podría ayudar a mantener el apoyo público a Ucrania.

Históricamente, el aumento de los precios de la gasolina también ha perjudicado a los líderes políticos en ejercicio. Efectivamente, los índices de aprobación del presidente Biden y los líderes europeos han caído a medida que aumentan los precios de la gasolina y otros bienes. Si no se controla, es el tipo de desaprobación generalizada que puede conducir a la inestabilidad política global y al extremismo. En Italia, por ejemplo, el reciente colapso del gobierno podría dar paso a una toma de poder por parte de una alianza de extrema derecha que incluye un partido político con raíces neofascistas.

Pero los precios de la gasolina también llegan a algo más profundo que la política partidista o cualquier debate de política individual: ayudan a dictar el estado de ánimo del público. A medida que la pandemia ha disminuido, los estadounidenses han esperado un regreso a la normalidad. Pero el aumento de los precios de la gasolina y la inflación, junto con un aumento de los delitos violentos y la guerra en Ucrania, alimentan una sensación más amplia de caos y anomia ya alimentada por el covid. Es como si los estadounidenses hubieran cambiado unas crisis por otras.

«¿Esto es en serio?» Caroline McNaney en Nueva Jersey recordó haber pensado. «Tomé un trabajo más lejos de casa para ganar más dinero, y ahora siento que no hice nada por mí mismo porque la gasolina es muy alta».

La caída de los precios de la gasolina, entonces, ofrece el tipo de alivio que la gente deseaba después de unos años caóticos.

Los precios de la gasolina caen más lentamente de lo que aumentan, por lo que es posible que haya más reducciones en el futuro Brandon Pavan para The New York Times

¿Por qué cayeron los precios de la gasolina?

Varios factores están detrás de las buenas noticias. La producción de petróleo y gas ha aumentado en los EE. UU. y en otros lugares, aumentando la oferta. Algunas personas conducen menos para evitar los precios altos, lo que reduce la demanda. Las interrupciones continuas de Covid, particularmente en China, también han jugado un papel; Los bloqueos hacen que menos personas viajen, lo que reduce aún más la demanda mundial de petróleo y gas.

El proceso se desarrolla lentamente, como resultado de lo que los expertos llaman el efecto “cohete y pluma”: los precios de la gasolina tienden a subir rápidamente, como un cohete, y a caer más lentamente, como una pluma. Las gasolineras son más rápidas para aumentar los precios y más lentas para reducirlos para maximizar las ganancias. Y mientras que el aumento de los precios de la gasolina impulsa a los consumidores a comparar más precios, la caída de los precios alivia la necesidad de hacerlo, lo que reduce la presión competitiva.

Que sigue

Dado que los precios de la gasolina caen más lentamente de lo que aumentan, todavía tienen espacio para caer más en las próximas semanas, para ponerse al día con los precios reducidos del petróleo, dijo Christopher Knittel, economista del M.I.T.

Y por extraño que parezca, una economía debilitada podría ayudar a reducir aún más los precios de la gasolina. La Reserva Federal ha aumentado recientemente las tasas de interés, elevando el costo de los préstamos en un esfuerzo por reducir la demanda y controlar la inflación. Eso podría conducir a más desempleo, pero también a una desaceleración en los aumentos de precios después de meses de inflación récord.

Más allá de unas pocas semanas, el futuro de los precios del gas es menos seguro. «Todavía existen riesgos», dijo Rachel Ziemba, experta en energía del Centro para una Nueva Seguridad Estadounidense.

La Comisión Europea propuso esta semana racionar el gas natural Janos Kummer/Getty Images

Entre ellos: más atrocidades en Ucrania podrían empujar aún más a Europa a dejar de comprar petróleo y gas ruso. Rusia podría tomar represalias contra las sanciones occidentales reteniendo sus envíos, restringiendo nuevamente el suministro mundial. El cambio climático sigue haciendo que las empresas de petróleo y gas sean cautelosas a la hora de aumentar demasiado la producción. La economía de China podría mejorar y aumentar la demanda, particularmente si las restricciones de Covid disminuyen.

Pero por ahora, la caída de los precios de la gasolina es una buena noticia durante un verano empañado por titulares sobre inflación, guerra, olas de calor y aumento de casos de covid.

Para más

Alemania está compitiendo para asegurar el suministro de gas antes del invierno y un posible corte ruso.

Los estadounidenses han realizado cambios en el estilo de vida, como compartir vehículos y andar en bicicleta al trabajo, para evitar los altos precios de la gasolina. Algunos también han comenzado a conducir menos, lo que podría ralentizar la economía.

El Banco Central Europeo subió las tasas de interés por primera vez en más de una década.