Luisa Blanco: La gimnasta colombiana que no vive en el mundo de los resultados… pero los consigue

PARÍS, 29 julio  — “Lo que pase hoy no me define a mí o mi carrera”, escribió Luisa Blanco en su cuenta de Instagram. No, no fue una manera de curarse en salud.

Es el vivo reflejo de que vive por los momentos, no por los puntos. Aún cuando el domingo sumó los suficientes para convertirse en la primera gimnasta colombiana en clasificarse a una final olímpica, ubicándose entre las 24 mejores en el all-around con 51.698 unidades.

Blanco se permite definir por el sacrificio de sus padres, quienes dejaron todo atrás en Colombia para radicarse en California en busca de un futuro mejor. Permite definirse por su crianza, o su formación académica. Pero no por un resultado.

“No me gusta ver la puntuación y donde quedo, porque si yo me siento satisfecha con mi trabajo eso es lo que más importa”, reconoció el domingo, horas antes de que el trabajo y los puntos se encontrasen en el punto exacto de la clasificación.

En la tarima mostró el talento que la convirtió en campeona nacional universitaria en Estados Unidos en la viga de equilibrio, y fuera de la pista demostró que vive lo que predica.

“Aunque todo el mundo cree que hay mucha presión porque son los Juegos Olímpicos”, señaló. “En mi mente, es solamente gimnasia”.

“Todas las experiencias que he vivido acá, las tengo yo pero las vive ella”, dijo refiriéndose a su madre, quien no pudo viajar para acompañarla.. “Su sueño fue sacar a sus hijos adelante, fue todo su propósito al moverse a los Estados Unidos y dejar a su familia. Yo soy una parte pequeña de los triunfos de mi mamá”.

Sandra Saavedra es una madre orgullosa. Y, si sincera, también lo es su hija.

“Entiendo cuando la gente dice que no lo puedes poner en palabras porque ¿cómo pones los últimos 16 años de tu vida en un par de oraciones?”, admitió. “Esto es lo bello. Estoy muy agradecida de estar aquí, no me malinterpreten, pero es solo gimnasia”.

Su diario en redes, un ejercicio que inició en su infancia, cuando pasó problemas para expresar sus sentimientos, es más que una catarsis. Es un compromiso.

“Este día es para la niña que fui. Este día es del que le contaré a mis hijos en 20 años”.

Comentarios
Difundelo
Permitir Notificaciones OK No gracias