Miguel Vargas advierte que la misión de la ONU en Haití necesita garantías reales de apoyo
Reitera llamado a un bloque regional de presión internacional
Santo Domingo, 3 – El presidente del Partido Revolucionario Dominicano (PRD) y exministro de Relaciones Exteriores, Miguel Vargas Maldonado, valoró la aprobación de la Misión Multilateral de Apoyo a la Seguridad en Haití por parte del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas como un avance necesario, pero advirtió que la medida “no será efectiva sin respaldo logístico, financiero y político sostenido”.
La resolución, impulsada por Estados Unidos y Panamá, autoriza el despliegue de una fuerza internacional para enfrentar el colapso institucional y el control de bandas armadas en el vecino país. Vargas reconoció su importancia, pero advirtió que “sin acciones adicionales y compromisos concretos, la misión podría quedar limitada en su alcance”.
“Esa disposición amerita medidas adicionales que se constituyan en garantías reales para alcanzar, en el menor plazo posible, el desmantelamiento total de las bandas terroristas que hoy controlan gran parte del territorio haitiano”, sostuvo el dirigente político opositor.
Como vicepresidente mundial de la Internacional Socialista y presidente para América Latina y el Caribe de esa organización, Vargas Maldonado es proponente de la confirmación de un bloque regional de naciones caribeñas y latinoamericanas que, de manera coordinada, reclame a la comunidad internacional acciones puntuales y efectivas para la pacificación de Haití.
El presidente del PRD también respaldó los esfuerzos institucionales realizados desde el Estado dominicano para fortalecer la seguridad nacional, al tiempo que llamó a una estrategia exterior más proactiva.
“Lo que ocurre en Haití representa una amenaza directa para la estabilidad de la República Dominicana, y no basta con medidas defensivas: necesitamos una ofensiva diplomática regional articulada”.
Finalmente, Miguel Vargas reiteró que la pacificación de Haití “es una condición primaria e indispensable para relanzar su Estado, crear condiciones para la inversión y el desarrollo, y garantizar la estabilidad de toda la isla”.
“Esa, y no otra, es la ruta que le depara un mejor futuro al pueblo haitiano y una verdadera garantía de sosiego para nuestro país y otras naciones de la región”, concluyó.