Milton Ray Guevara: «Una sola sentencia que no sea cumplida es un atentado al Estado de derecho»
Fecha: 11 de septiembre- El presidente del Tribunal Constitucional (TC) de la República Dominicana, Milton Ray Guevara, expresó su preocupación por el desacato a 106 de las sentencias emitidas por su tribunal. Más alarmante aún es que la mayoría de estas sentencias (61) no han sido cumplidas por instituciones del Poder Ejecutivo. Ray Guevara considera que este desacato a las sentencias del TC es un asunto grave que socava el Estado de derecho.
El presidente del TC reconoce que este problema no es exclusivo de la República Dominicana y que otros tribunales constitucionales en todo el mundo también enfrentan desafíos similares en cuanto al cumplimiento de sus decisiones. Sin embargo, subraya que incluso una sola sentencia que no se cumpla representa una amenaza al Estado de derecho, y cuando esto lo hace el Estado, la situación es aún más preocupante.
Ray Guevara enfatiza que el TC no ha atribuido la responsabilidad del incumplimiento a ningún gobierno en particular, ya que se basa en el principio de continuidad del Estado. Afirma que los gobiernos son temporales, pero el Estado es permanente.
Por su parte, el Poder Ejecutivo ha aclarado que solo tres de las sentencias no cumplidas se han emitido durante la presente administración. Además, Antoliano Peralta, consultor jurídico del Poder Ejecutivo, ha explicado las medidas que se están tomando para asegurar el cumplimiento de las sentencias.
El TC ha implementado procedimientos para hacer cumplir sus dictámenes, incluyendo medidas disciplinarias, imposición de astreintes (multas por incumplimiento), uso de la fuerza pública, denuncia ante la jurisdicción penal, proceso disciplinario y la publicación de los nombres de los responsables que no cumplen las sentencias.
El presidente del TC atribuye el incumplimiento de las sentencias a una cultura autoritaria arraigada en el país, que ha experimentado dictaduras y gobiernos autoritarios en el pasado. Destaca que la Constitución escrita tiene como objetivo limitar el poder de los gobernantes, lo cual no suele ser bien recibido por quienes están en el poder.
El proceso para asegurar el cumplimiento de las sentencias comienza con la solicitud de las partes beneficiadas con las decisiones del TC. Luego, la Unidad de Seguimiento de Ejecución de Sentencias (USES) notifica a la parte obligada, ya sean personas, instituciones o empresas, y solicita una explicación de los motivos del incumplimiento.
El TC realiza un expediente con la opinión de ambas partes y apodera al Pleno del TC, que designa un juez para representarlo y llevar a cabo un proceso de conciliación. En caso de que no se llegue a un acuerdo, el tribunal emite una resolución para determinar las medidas a tomar.
El presidente del TC ha estado abogando por la enseñanza de la Constitución en las escuelas y universidades desde la fundación del tribunal hace 11 años. La Constitución y la Ley Orgánica del Tribunal Constitucional requieren la enseñanza de la Constitución en todos los centros de educación públicos y privados. Sin embargo, este mandato aún no se ha implementado completamente, a pesar de los esfuerzos del presidente del TC para promoverlo.
Ray Guevara argumenta que la enseñanza de la Constitución es fundamental para formar ciudadanos conscientes de sus derechos y deberes y ayudaría a construir una sociedad más informada y empoderada. También considera que esta enseñanza es especialmente importante en un momento en que se observa un aumento en la violencia y el desafío a la autoridad entre la juventud dominicana.
Ray Guevara destaca la importancia del cumplimiento de las sentencias del TC como un elemento fundamental para preservar el Estado de derecho en el país.
Aunque reconoce los desafíos que enfrentan, dijo que el TC está tomando medidas para garantizar que sus decisiones sean respetadas y cumplidas por todas las partes involucradas. Además, sigue abogando por la enseñanza de la Constitución como un medio para empoderar a los ciudadanos y fortalecer la democracia en la República Dominicana.