Ministro de Agricultura de República Dominicana aboga por flexibilizar medidas comerciales ante construcción de Canal en Haití
Santo Domingo, 5 de octubre – El ministro de Agricultura de República Dominicana, Limber Cruz, expresó la necesidad de revisar y flexibilizar las medidas comerciales tomadas por el Gobierno dominicano en respuesta a la construcción de un canal en el río Dajabón o Masacre por parte de nacionales haitianos.
Cruz, en una entrevista realizada en El Nuevo Diario Podcast, manifestó que se debe reconsiderar la estrategia actual y adoptar un enfoque más flexible en términos comerciales hasta que cese la construcción del canal. Enfatizó que la República Dominicana debe aprender a convivir con la mano de obra haitiana, pero de manera regulada y controlada en la zona fronteriza.
El ministro Cruz reconoció que, tras el cierre de la frontera con Haití, otros países han intentado ocupar el espacio comercial que República Dominicana tenía con su vecino. Esto ha llevado a una competencia por los negocios y ha planteado desafíos económicos.
A pesar de las restricciones fronterizas y migratorias, Cruz argumentó que es importante encontrar formas de continuar exportando productos dominicanos a Haití, ya que los gobiernos tienen limitaciones presupuestarias. Destacó que esta situación debe abordarse con sensibilidad y adaptabilidad, ya que todo tiene su momento y su tiempo.
El ministro Cruz recordó que el presidente de la República Dominicana, Luis Abinader, tomó la decisión de cerrar la frontera en un momento específico para enviar un mensaje y una señal. Afirmó que esta señal ya ha tenido efecto, y se han producido cambios significativos en la situación, incluyendo pronunciamientos de la ONU.
Sin embargo, Cruz insistió en la idea de flexibilizar las medidas comerciales con Haití. Reconoció que su posición es especialmente complicada, ya que está personalmente involucrado en la empresa Codevi, ubicada en la frontera, y también es productor de plátanos. Esto lo coloca en una situación única en la que debe equilibrar sus intereses personales con su responsabilidad ministerial y su afiliación política.
El ministro de Agricultura mencionó la importancia de considerar a los productores de harina, aceite, varillas, cemento y otros sectores que tienen relaciones comerciales significativas con Haití. Aseguró que su ministerio ha trabajado arduamente para apoyar a los productores y garantizar la estabilidad económica en la región fronteriza.
En cuanto al uso de la mano de obra haitiana en la República Dominicana, Cruz argumentó que es una realidad que el país debe enfrentar y regular. Destacó que la República Dominicana no es el único país que se enfrenta a este desafío, y mencionó ejemplos como Puerto Rico, España y otros países europeos que también lidian con cuestiones similares.
Cruz señaló que una de las debilidades frente a Haití es la falta de un sistema de registro de identidad confiable en el país vecino. Relató que en el parque industrial Codevi, se ha enfrentado a situaciones en las que los trabajadores haitianos, que habían sido rechazados por problemas de comportamiento o rendimiento, regresaban bajo un nombre diferente, lo que dificultaba la gestión y la seguridad laboral.
El ministro Cruz planteó la posibilidad de que Haití pueda mejorar sus instituciones con la intervención de la ONU y fortalecer su capacidad de registro de identidad. Insistió en que la República Dominicana debe confiar en las instituciones y destacó que la resolución de este problema es fundamental para el éxito de la región fronteriza.