Padres de recién nacidos que fallecen en hospitales normalmente no reclaman los cadáveres
Santo Domingo, 5 de octubre – En la República Dominicana, la mayoría de los padres que lamentablemente pierden a sus recién nacidos en hospitales optan por no reclamar los cuerpos de los neonatos fallecidos y permiten que el establecimiento de salud se encargue de su disposición final.
Estos hospitales suelen tener contratos con funerarias para llevar a cabo este proceso de acuerdo con los protocolos establecidos, que incluyen el uso de un carro fúnebre para el traslado de los cuerpos.
La doctora Dolores Feliz, del componente Infantil del Servicio Nacional de Salud (SNS), explicó que cuando se notifica a los padres o familiares sobre el fallecimiento del neonato, el hospital les ofrece la opción de recibir el cuerpo del recién nacido. Sin embargo, la mayoría de los padres elige que el hospital se encargue de la sepultura.
Los casos en los que los padres deciden llevarse el cuerpo del bebé se manejan de la misma manera que otros fallecimientos. El hospital entrega el cuerpo junto con el acta de defunción, siempre y cuando no haya ninguna razón para una investigación adicional. En casos que requieran investigaciones, el cuerpo se remite al Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF).
Feliz destacó que los centros de salud siguen las normas y protocolos establecidos por el Ministerio de Salud Pública en estos casos.
Uno de los aspectos fundamentales de estos protocolos es el transporte adecuado de los cadáveres. Los cuerpos deben ser trasladados en carros fúnebres, y dado que los centros de salud no cuentan con este tipo de transporte, la mayoría de los hospitales tienen acuerdos con funerarias para garantizar el cumplimiento de este requisito.
En el caso de neonatos cuyos padres optan por no reclamar los cuerpos, el hospital entrega los cadáveres a la funeraria en una pequeña caja junto con los certificados de defunción. A partir de ese punto, la funeraria se encarga de coordinar con las autoridades municipales y del cementerio para la sepultura.
Este procedimiento es similar cuando se trata del fallecimiento de adultos que no son reclamados por sus familiares. Los hospitales siguen estos protocolos para garantizar que los cadáveres no permanezcan en las instalaciones de atención médica por un período prolongado, en cumplimiento de las regulaciones vigentes.
La noticia del hallazgo de los cuerpos de seis bebés en las afueras del cementerio Cristo Salvador de la avenida Mella ha generado preocupación y conmoción en la población dominicana. Según explicaciones del Hospital Ciudad Juan Bosch, estos bebés habían sido entregados a la Funeraria La Popular, con la que tenían acuerdos, para su sepultura.
