Polémica por la extracción de grandes volúmenes de agua del río Masacre en Haití
Santo Domingo, 20 de diciembre – Un proyecto de construcción de un canal de riego, que se alimentará del río Masacre en Haití, ha generado controversia y preocupación por su potencial impacto en la región. A pesar de los esfuerzos del gobierno dominicano por detener esta iniciativa, las obras han continuado, ampliando la extracción de agua del afluente para abastecer campos de cultivo en varias zonas de Haití.
El comité encargado de la edificación de este canal ha recibido importantes donaciones, incluyendo dinero, cemento, varillas y otros materiales, lo que ha permitido la expansión de la obra. Los haitianos han erigido dos muros de gaviones para dirigir el cauce del río Masacre hacia el dique-toma, el cual abastecerá el canal destinado a la irrigación de cultivos en diferentes localidades haitianas.
En el lugar, se ha observado un considerable número de trabajadores haitianos empleando maquinaria pesada como excavadoras hidráulicas, rodillos compactadores tándem y camiones volteos para llevar a cabo la construcción del dique-toma y la ampliación de los muros de gaviones.
Sin embargo, estas acciones han despertado preocupaciones en el lado dominicano. El gobierno de la República Dominicana ha expresado su inquietud sobre los posibles efectos negativos que este proyecto pueda tener en la biodiversidad de la laguna Saladillo, así como en los productores agrícolas y ganaderos de las provincias de Dajabón y Montecristi.
Paralelamente, en un intento por mitigar los posibles impactos, el Instituto Nacional de Recursos Hidráulicos (Indrhi) ha puesto en funcionamiento una parte del canal de La Vigía, con tres bombas capaces de mover 15,500 galones por minuto. Esta medida busca llevar agua a los productores agrícolas de la provincia de Dajabón como solución inmediata.
Las autoridades dominicanas han destacado que la rehabilitación del canal La Vigía será de gran beneficio para más de 300 productores agrícolas, protegiéndolos de los efectos negativos que pueda ocasionar la construcción del canal por parte de Haití en la comunidad de Juana Méndez, destinado a desviar el flujo de agua hacia territorio haitiano.
Cabe señalar que el canal La Vigía se origina en el río Masacre y se encuentra en una ubicación superior a la zona donde los haitianos están desarrollando su propio canal de riego. La polémica en torno a este proyecto continúa generando preocupación y debate entre las autoridades y los sectores afectados en la región fronteriza entre Haití y la República Dominicana.
