Policía de Haití detiene a esposas de pandilleros mientras intensifica lucha contra bandas criminales en Artibonito
Santo Domingo, 20 de diciembre – La Policía Nacional de Haití informó la detención de las esposas de tres miembros de la peligrosa banda Gran Grif, quienes intentaban salir de la zona de Palmis, en Artibonito, para esconderse en República Dominicana.
Según el informe policial, estas capturas forman parte de los esfuerzos en curso para restablecer la seguridad en el departamento de Artibonito, una región gravemente afectada por la violencia de las pandillas.
La banda Gran Grif, liderada por Luckson Elan, es conocida por sus crímenes atroces, incluyendo la masacre en Pont Sondé en octubre pasado, que dejó 115 muertos, y un reciente ataque en Petite-Rivière de Artibonito, ocurrido el 10 de diciembre, donde al menos 20 personas perdieron la vida.
Según la Policía haitiana, esta organización ha expandido su control territorial, cometiendo violaciones de derechos humanos y participando en el tráfico de armas y municiones.
«Su banda es la mayor y más poderosa del departamento de Artibonito, responsable de ejecuciones extrajudiciales, violaciones, reclutamiento de menores, robo, destrucción de propiedades, secuestros y otros delitos graves», señala un informe de la ONU. El líder, Luckson Elan, ha sido sancionado por la ONU y Estados Unidos por representar una amenaza para la paz y estabilidad de Haití y la región.
En un comunicado emitido este jueves, la Policía Nacional de Haití (PNH) confirmó la captura de tres concubinas vinculadas a la banda Gran Grif y la banda Palmis, liderada por Jonas, otro jefe criminal del área. Estas mujeres fueron detenidas mientras intentaban escapar del control policial en Artibonito, una región que se ha convertido en el epicentro de la lucha contra el crimen organizado.
Además de las detenciones, la Policía informó que en días recientes, más de 16 miembros armados de Gran Grif fueron abatidos durante un intercambio de disparos con las fuerzas del orden. Según las autoridades, estos operativos son parte de una estrategia intensificada para desmantelar las bandas armadas que operan en todo el territorio haitiano, con un enfoque especial en Artibonito.
«La Policía Nacional de Haití ha intensificado sus operaciones en Artibonito para combatir el bandolerismo a gran escala, logrando avances significativos en la lucha contra las pandillas», indicó un portavoz de la institución.
Las intervenciones buscan reducir el control territorial de las bandas y garantizar la seguridad de los ciudadanos, quienes han vivido bajo el asedio constante de la violencia.
Un video que circula en los medios locales muestra a agentes policiales en lo que se presume era una base de la banda Gran Grif, donde incluso se observa una pintura del líder Luckson Elan en la pared. Este tipo de evidencia subraya el grado de influencia y control que estas organizaciones han logrado en ciertas áreas.
Elan, descrito como el cabecilla de la banda más poderosa en Artibonito, ha sido un actor clave en el incremento de la violencia y el tráfico ilícito en Haití. Según el informe de la ONU, su liderazgo no solo ha intensificado los abusos contra los derechos humanos dentro del país, sino que también representa un desafío para la estabilidad de la región.